Es probable que Rudy Giuliani piense que Sidney Powell ha ido demasiado lejos esta vez. El equipo jurídico de la campaña de Trump se ha distanciado de la abogada conservadora después de que el pasado jueves hiciese varios comentarios que van en la línea de las teorías conspirativas que han despertado grandes críticas, reseña The Guardian.
“Sidney Powell está ejerciendo la abogacía por su cuenta. No es miembro del equipo legal de Trump. Tampoco es abogada del presidente a título personal”, dijeron Giuliani y otra abogada de Trump, Jenna Ellis, en una declaración el domingo.
Ahora mismo Donald Trump se enfrenta a la presión de los miembros del Partido Republicano para que abandone la “corrosiva” lucha para anular las elecciones e invalidar millones de votos.
No obstante, el mismo Donald Trump había anunciado la participación de Powell en su equipo de asesores, abogados y representantes que estarían encabezados por Giuliani.
Esta declaración insinúa el caos en un equipo legal que ha perdido caso tras caso en sus esfuerzos por anular los resultados de las elecciones del 3 de noviembre. Los bufetes de abogados se han retirado de los casos, y en el último revés, Matthew Brann, un juez de distrito republicano de EE.UU. en Pensilvania, rechazó la petición de la campaña Trump de privar del derecho de voto a casi 7 millones de votantes allí.
El domingo por la tarde, la campaña de Trump presentó una apelación contra el fallo de Brann en Pennsylvania.
Se produjo después de que fallaran similares licitaciones judiciales en Georgia, Michigan y Arizona para evitar que los estados certificaran el total de sus votos.
La declaración sobre Powell fue la última señal de cautela sobre su enfoque, incluso en algunos círculos conservadores.
Powell hizo titulares con sus declaraciones en una conferencia de prensa el jueves donde, junto con Giuliani y Ellis, sugirió incorrectamente que un servidor informático albergaría evidencia de irregularidades en la votación estaba localizado en Alemania, que el software de votación usado por Georgia y otros estados fue creado bajo la dirección de Hugo Chávez y que los votos para Trump probablemente habían sido cambiados a favor de Biden.
Sin embargo, sus contribuciones de ese día se vieron ensombrecidas en gran medida por las gotas de tinte chorreando por la cabeza de Rudy Giuliani.
Powell, una ex fiscal federal, asumió el año pasado como abogado principal del ex asesor de seguridad nacional de Trump, Michael Flynn, quien se declaró culpable en la investigación de Rusia del abogado especial Robert Mueller.
Desde entonces, un juez federal ha rechazado sus afirmaciones de mala conducta de la fiscalía y ha respondido de manera inquisitiva a algunos de sus argumentos, incluida la sugerencia que hizo en una audiencia hace varias semanas de que sus conversaciones con Trump sobre el caso Flynn eran privilegiadas.