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El Pentágono crea nueva división para investigar y analizar ovnis

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EVIDENCIA. Muchos casos de avistamientos se mantienen como clasificados por el Pentágono. | Foto: captura de pantalla de video.

Investigar objetos no identificados que violen el espacio aéreo americano. Ese será el objetivo de la nueva división del Pentágono anunciada el martes, que se dedicará a comprender su origen y si pudieran ser una amenaza para la seguridad nacional. Se llamará Grupo de Sincronización de Gestión e Identificación de Objetos Aerotransportados (AOIMSG).

La nueva división AOIMSG sustituirá a US Navy's Unidentified Aerial Phenomena Task Force, la división que anteriormente se encargaba de estos fenómenos. Incluirá no solo la recopilación de datos de inteligencia y contrainteligencia, sino también ofrecer soluciones para cualquier amenaza que dichos objetos puedan representar. Su director, que aún no ha sido nombrado, recomendará qué personal y otros recursos se necesitan.

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¿Por qué crearla? Surge como respuesta a más de 140 informes de “fenómenos aéreos no identificados (UAP, por sus siglas en inglés)”, que datan de hace dos décadas. Agrupados en un estudio, elaborado por la Oficina del Director de Inteligencia Nacional, que intentó determinar si eran signos de amenazas extranjeras, anomalías atmosféricas, sensores defectuosos o incluso vida extraterrestre, no tuvo conclusiones contundentes.

  • Ante la carencia de información, los funcionarios de defensa se dieron cuenta de la necesidad de mejorar la capacidad de comprensión sobre los UAP.
  • “El Departamento de Defensa se toma muy en serio los informes de incursiones, por cualquier objeto en el aire, identificado o no identificado, e investiga cada uno de ellos”, dice el comunicado.

¿Por qué es importante? El surgimiento de estos objetos en el espacio aéreo era, para el público, algo anecdótico, incluso visto como fantástico para algunos. Pero mucha de la documentación que se tiene ahora es gracias al personal estadounidense, sobre todo de aviadores de la Armada.

  • Desde entonces, Capitol Hill ha dejado claro sus intenciones en el Pentágono de que se obtengan conclusiones precisas y completas sobre qué realmente son estos objetos y si son una amenaza para la seguridad nacional.
  • También hay otros eventos que hacen más preponderante esta investigación. Por ejemplo, en las últimas semanas,  funcionarios estadounidenses examinaron pruebas aparentes de un misil hipersónico de China, capaz de orbitar la Tierra y lanzar armas, con potencialmente nuclear, a objetivos de una manera difícil de rastrear. Rusia, mientras tanto, completó recientemente una prueba de misiles antisatélite, que generó una cantidad preocupante de desechos espaciales.

¿Qué se conocen como ovnis? Los objetos voladores no identificados, de allí el acrónimo ovni, tienen un término acuñado más formal: “Fenómenos aéreos no identificados (UAP, en inglés”. Si bien ha estado rodeado de teorías sobre la existencia incluso visita de vida extraterrestre, promovida sobre todo por la ciencia ficción, no hay un consenso sobre su origen.

  • Videos sobre estos objetos han sido mayormente filtrados en las redes sociales, generando teorías sobre la naturaleza de estas imágenes.
  • Entre los republicanos y demócratas tampoco hay un acuerdo sobre si prestarles atención a estos fenómenos, muchas veces banalizado.
  • El año pasado el Congreso ordenó el año pasado al poder ejecutivo que informara al público en general sobre las actividades de la unidad del Pentágono encargada de estudiar el fenómeno.

Lo que dice el primer informe sobre UAP. El documento publicado en junio presentó múltiples explicaciones posibles sobre cuál podría ser la fuente de estos objetos no identificados.

  • Tres de las categorías (basura espacial, anomalías climáticas o atmosféricas y pruebas de aeronaves clasificadas realizadas por contratistas estadounidenses) no representaban una amenaza crítica para Estados Unidos, aunque los autores no descartaron que tales objetos pudieran representar otros peligros potenciales para la seguridad del vuelo.
  • Una cuarta categoría sugirió que los objetos no identificados podrían ser evidencia de tecnología avanzada operada por adversarios extranjeros.
  • También dejó abierta la posibilidad de otras explicaciones para los fenómenos no identificados observados, aunque sus autores tuvieron cuidado de señalar que no encontraron evidencia de vida extraterrestre.
  • Una sección del documento sigue siendo clasificada y ajena al público, lo que hace crecer las teorías de la conspiración.

En las próximas semanas, el gobierno emitirá una guía de implementación con más detalles sobre el Director de AOIMSG, la estructura organizativa, las autoridades y los recursos.

Con información de The Washington Post y Departamento de Defensa.

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