Después de tres semanas en las que el financiamiento para la respuesta a la pandemia de COVID-19 era incierto, los legisladores de Senado llegaron a un acuerdo de 10.000 millones de dólares, que incluye vacunas, tratamientos antivirales y otros suministros, pero reduce a la mitad el presupuesto solicitado por la Casa Blanca y proporciona un esfuerzo menor para la vacunación mundial.
Presupuesto menor. Para continuar la respuesta ante la pandemia se requiere 22,5 mil millones de dólares, que incluye 18.250 millones de dólares para el Departamento de Salud y Servicios Humanos y 4.250 millones para el Departamento de Estado y la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional.
- Sin embargo, el acuerdo de los legisladores ronda los 10.000 millones de dólares, un monto inferior al que pide la administración, y es más bajo que los 15.000 millones que estaban en las negociaciones para el presupuesto del año fiscal en curso, y que a última hora tuvieron que eliminarlo para sacar el proyecto adelante.
- “Hemos llegado a un acuerdo en principio sobre todos los gastos y todas las compensaciones”, dijo el senador republicano Mitt Romney, quien lideró las negociaciones para los republicanos después de que rechazaran el proyecto anterior. El dinero vendrá de fondos no gastados en paquetes de estímulo anteriores y planean hacer una votación la semana que viene, afirmó.
- El líder de la minoría del Senado, Mitch McConnell, se mostró optimista al respecto. Su colega, el líder de la mayoría, Chuch Schumer, dijo que los legisladores están “trabajando diligentemente” para acordar un paquete que abordaría las necesidades nacionales y globales.
Dinero para qué. La mitad de los fondos irían a terapias contra el covid, mientras que la otra mitad quedaría a "discreción" del secretario del Departamento de Salud y Servicios Humanos, de acuerdo con el senador Roy Blunt.
Varios legisladores republicanos indicaron que se reservarían alrededor de 1.000 millones en fondos para apoyar las vacunas globales, por debajo de la solicitud de 5.000 millones de la Casa Blanca para ayuda global. Sin embargo, ante los cuestionamientos de los demócratas, la suma aún se está negociando.
Un momento crítico. Desde mediados de marzo, la administración Biden ha estado presionando al Congreso para que financie los programas vinculados al manejo de la pandemia, ya que se están quedando sin fondos para vacunas, pruebas y tratamientos.
- Incluso el gobierno federal ya comenzó a reducir un programa para cubrir los costos de los proveedores de atención médica que brindan pruebas, tratamientos y vacunas contra el coronavirus a estadounidenses sin seguro, una iniciativa que, según las autoridades, ha costado alrededor de 2.000 millones de dólares por mes.
- También redujo el suministro de tratamientos con anticuerpos monoclonales a los estados en un 35% debido a la falta de financiación para la pandemia.
- Además, el Congreso pronto tomará un descanso de dos semanas a partir del 9 de abril, por lo que es necesario para la administración resolver la traba, ya que se teme que, si no se logra un acuerdo al respecto, la respuesta para COVID-19 podría estancarse en mayo.
- El miércoles el presidente Biden presionó nuevamente a los legisladores para que lleguen a un consenso pronto: “Congreso, por favor actúe. Tienen que actuar de inmediato. Las consecuencias de la inacción son graves. Solo crecerán con el tiempo, pero no tiene por qué ser así”.
Con información de The Washington Post