La semana pasada inició en Estados Unidos un juicio histórico. Genaro García Luna, secretario de Seguridad Pública del expresidente de México Felipe Calderón, es juzgado por aceptar sobornos para ayudar a los narcotraficantes a los que se suponía que debía neutralizar, entre ellos el Cártel de Sinaloa, la organización de Joaquín “El Chapo” Guzmán.
De ser hallado culpable García Luna será uno de los máximos funcionarios del gobierno mexicano en ser juzgado por crímenes relacionados al narcotráfico.
¿Quién es Genaro García Luna?
García Luna es ingeniero de formación y trabajó durante más de 20 años en las fuerzas de seguridad y orden público en México. El hombre llegó a dirigir la Agencia Federal de Investigación de México entre 2001 y 2005. Su ascenso dentro de la fuerza policial lo logró gracias a sus labores en el rescate de varios empresarios influyentes que le dieron los contactos necesarios.
Después de eso se convirtió en el Secretario de Seguridad Pública del entonces presidente Felipe Calderón. En su cargo, que ostentó entre 2006 y 2012, era la cabeza en la guerra emprendida entre Calderón y los cárteles, además era un aliado clave de Estados Unidos en un iniciativa que proporcionó a la policía de México equipos, tecnología y formación para tratar de frenar el flujo de drogas a través de la frontera.
El exfuncionario tiene 54 años, está casado y tiene dos hijos. Todo su núcleo familiar está señalado por corrupción.
Genaro y Luna Sofía García Pereyra, hijos de Genaro García Luna están señalados de estar involucrados, junto con su madre Linda Cristina Pereyra, en la creación de una empresa —Blue Motion of Aventura LLC— una joint venture que se encargaba de comprar propiedades adquiridas por el ex secretario de Estado mexicano en Florida con dinero de origen ilegal según el gobierno de Estados Unidos y el gobierno de México.
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A través de ellas, García Luna y su esposa Linda Cristina, adquirieron al menos 8 propiedades y bienes con un valor de al menos 10 millones de dólares, incluyendo una residencia de 3,5 millones de dólares, en Golden Beach, un yate de lujo, y seis departamentos, publica DW.
García Luna se retrató con el expresidente de Estados Unidos Barack Obama, la exsecretaria de Estado Hillary Clinton, el exsenador John McCain y otros altos cargos del país. Sin embargo, y pese a sus influencias, las denuncias por sus vínculos con el narcotráfico hamás se marcharo, destaca AP.
Fue en 2018 cuando finalmente lo alcanzaron. Durante el juicio de "El Chapo" Guzmán en Nueva York, un ex miembro del cártel testificó en 2018 que él personalmente entregó al menos $ 6 millones en sobornos a García Luna. Y añadió que los miembros del cártel habían acordado reunir unos $50 millones para pagarle coimas.
Pero la vida de García Luna no ha estado exenta de polémicas, el canal Univisión reveló en una investigación que el funcionario estaba vinculado a un empresario que recibía beneficios de la lucha contra los cárteles de las drogas.
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Luna, que se trasladó a Miami tras dejar su puesto en el Gobierno, fue detenido en 2019 en Texas y desde entonces ha estado recluido sin fianza en un calabozo federal.
García Luna se declaró inocente de los cargos ante el tribunal federal que lo juzga, en el que Guzmán fue condenado por dirigir durante décadas una extensa operación internacional de contrabando de drogas, si es hallado culpable podría enfrentar décadas de prisión.
El ingeniero ha dicho que es "falso, difamatorio y perjurio decir que alguna vez he recibido bienes materiales de alguna persona, policía o grupo criminal".
Su abogado principal, César de Castro, dijo a los miembros del jurado que el caso del gobierno se basaba en "rumores, especulaciones y las palabras de algunos de los mayores criminales del mundo", miembros del cártel que iban a testificar contra él.
"No se dejen engañar por los cárteles", dijo a los miembros del jurado.
