La falta de investigación sobre la demencia ha llevado a que la enfermedad esté envuelta en una serie de mitos y conceptos erróneos sobre su causa y de cómo es la vida de una persona que vive con demencia. Es importante conocer la realidad para mejorar la vida de las personas que padecen esta enfermedad como la de sus cuidadores.
1. La demencia es parte del envejecimiento, así que cuando crezca yo también tendré
La realidad es que la demencia no es una parte natural del envejecimiento y la mayoría de las personas no la desarrollan cuando llegan a ser adultos mayores.
2. Mi papá está teniendo problemas de memoria, eso significa que tiene demencia
Empezar a tener pérdidas de memoria no significa que una persona tenga demencia. De hecho, muchas formas de demencia no tienen la pérdida de memoria como su principal síntoma.
Si cree que alguien puede tener demencia esté atento a otros síntomas como cambios en la conducta o su humor.
3. Esta enfermedad solo afecta a las personas mayores
La demencia es una enfermedad degenerativa, es decir que progresa y empeora con el tiempo. A pesar de que las personas mayores de 65 años suelen ser las más afectadas, esta enfermedad puede aparecer en una etapa más temprana. Por ejemplo, hace poco se diagnosticó con Alzheimer (el tipo de demencia más común) al primer joven de 19 años.
4. Las personas con demencia no entienden lo que pasa a su alrededor
Uno de los mayores errores que cometen las personas es subestimar la capacidad de entendimiento de una persona con demencia.
En caso de una persona que se encuentra en una etapa avanzada de demencia, quizás no sea capaz de comunicarse directamente, pero aún así reconocen y comprenden los sentimientos que hay detrás de sus acciones o palabras. Para mejorar tu comunicación con alguien con demencia puedes utilizar todos los sentidos, como el tacto o escuchando música.
5. Como mi madre tiene demencia, yo también tendré cuando envejezca
A pesar de que los genes juegan un rol importante en el desarrollo de algunos tipos de demencia, la mayoría de las personas que viven con la enfermedad no tienen un vínculo genético fuerte y conocido. De hecho, menos del 5% de las personas que viven con Alzheimer la han heredado a través de un familiar, según datos de la Alzheimer Society.
6. La demencia se puede prevenir
En la actualidad no existe cura ni un tratamiento para prevenir o detener el progreso de la demencia. A pesar de esto, existen medicamentos para tratar los síntomas de la enfermedad de Alzheimer que pueden ser efectivos en el tratamiento de otros tipos de demencia.
- Hacer actividad física
- Vida social activa
- Comer de manera saludable
- Desafiar a tu cerebro
- Evitar los cigarrillos
- Manejar el estrés
7. Luego de un diagnóstico de demencia, la persona es completamente dependiente
Muchas de las personas diagnosticadas con demencia tienen una vida activa por muchos años. Aquellas diagnosticadas en una etapa temprana de la enfermedad solo tienen un deterioro leve y aún son capaces de cuidarse por sí mismas y tomar decisiones.