El fiscal del distrito de Manhattan, Alvin Bragg, dijo que el gran jurado sopesa posibles cargos contra el expresidente Trump y tomará una decisión este jueves y no hoy, miércoles 22 de marzo, como estaba planteado.
La razón del retraso no está clara. No se sabe a ciencia cierta si significa que el jurado escuchará a otro testigo potencial, advierte NBC NY. Tras escuchar el testimonio del aliado del expresidente, Robert Costello, el jurado —según múltiples fuentes citadas por el medio— estaba preparado para emitir una acusación desde el viernes pasado. Preveían volver a reunirse el miércoles por la tarde.

La oficina de Bragg declinó comentar. Solo añadió que no podía hablar en nombre del jurado. NBC News confirmó, sin embargo, que los fiscales estaban molestos con la aparición de Cohen ante el gran jurado y se puso en contacto con su abogado para decirle Cohen no debe comparecer ante el panel de nuevo. Los procedimientos han estado envueltos en secreto.

No ha habido ningún anuncio oficial de ningún plazo para el trabajo del gran jurado en la investigación del dinero por silencio. Los organismos de seguridad reforzaron la seguridad ante la posibilidad de una inminente acusación.
El refuerzo de la seguridad ocurre tras el falso anuncio anticipado de Trump de su detención y el llamado a sus seguidores a protestar en La Gran Manzana.
Sin eco llamado de Trump a protesta nacional
En las calles de la gran Manzana se observan policías completamente uniformados. El Servicio Secreto y otros oficiales aseguraron el perímetro del Tribunal Penal de Manhattan ante una posible acusación del gran jurado.

Esta misma semana, grupos —se cree que afiliados al candidato presidencial— difundieron imágenes falsas sobre la detención del expresidente, que no ha ocurrido.
Las protestas son intermitentes y en gran medida silenciosas. Miembros del New York Young Republican's Club (Club de Jóvenes Republicanos de Nueva York) usaron sombreros de MAGA y manifestaron ante el Tribunal Penal de Manhattan a principios de semana. La Torre Trump, en el centro de Manhattan, fue escenario de un puñado de manifestaciones improvisadas.
De producirse la acusación y con la sombra de la insurrección del 6 de enero, la policía de Nueva York se prepara por si se intensifican las protestas.
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Fuentes policiales advirtieron que vigilan de cerca las redes sociales en busca de protestas e iniciativas para ralentizar el tráfico o perturbar la cotidianidad neoyorquina. De momento, ello no ha ocurrido.
Si el gran jurado de Manhattan acusa a Trump, se trataría de los primeros cargos penales contra un expresidente de Estados Unidos. Cualquier cargo o condena, sin embargo, no le prohibiría postularse nuevamente.
