Unos científicos observaron a través del telescopio de Gemini Sur en Chile, y que opera NOIRLab de NSF y Observatorio AURA, cómo una estrella similar al Sol se “come” un planeta. Las imágenes se viralizaron en las redes sociales.
El equipo de astrónomos registró la evidencia de lo que ellos denominan una “estrella moribunda” parecida al Sol.
Destacaron además que la evidencia de dicho fenómeno quedó registrada durante un “estallido largo y de baja energía”.
“Un signo revelador de un planeta rozando la superficie de un Sol distante. Este proceso nunca visto antes puede indicar cómo será el destino final de la Tierra. Cuando nuestro propio Sol alcance el final de su vida en unos 5 mil millones de años más”, revelaron en el portal noirlab.
A través de la investigación, los astrónomos recolectaron el ciclo de vida de las estrellas. Así como la forma en la que interactúan con los sistemas planetarios que las rodean. Así como también la forma en la que envejecen.
“Esta investigación confirma que cuando una estrella similar al Sol se acerca al final de su vida, se expande entre 100 y 1000 veces su tamaño original, y finalmente engulle los planetas internos del sistema. Se estima que tales eventos ocurren solo unas pocas veces al año en toda la Vía Láctea. Aunque las observaciones anteriores han confirmado las consecuencias de los engullimientos planetarios, los astrónomos nunca han captado uno en el acto, hasta ahora”.
Ryan Lau, astrónomo de NOIRLab y coautor de este estudio, explicó a la revista Nature que dichas observaciones brindan nuevas informaciones acerca de las estrellas.
“Estas observaciones brindan una nueva perspectiva para encontrar y estudiar los miles de millones de estrellas en nuestra Vía Láctea que ya han consumido sus planetas”, dice Ryan.
Finalmente, el director del programa del Observatorio Gemini de la NSF, Martin Still, reveló que Gemini Sur continúa expandiendo la comprensión del Universo. Por lo que estas nuevas observaciones respaldan las predicciones para el futuro del planeta.
“Este descubrimiento es un maravilloso ejemplo de las hazañas que podemos lograr cuando combinamos operaciones de telescopio de clase mundial y colaboración científica de vanguardia”.