No te harán más inteligente y pueden provocarte ansiedad. Personas que no forman parte del trastorno de déficit de atención con hiperactividad (TDAH) toman medicamentos para el TDAH pensando que les ayudará a concentrarse o tener un mejor rendimiento, pero esto no es así.
Tomar medicamentos como Adderall o Ritalin no tiene ningún efecto en el desarrollo cognitivo, incluso puede ocasionar problemas de ansiedad y nerviosismo, descubrió una nueva investigación publicada en la revista académica Science Advances, de la Asociación Estadounidense para el Avance de la Ciencia.
Se esforzaban más, pero su rendimiento no subía
Muchas personas toman medicamentos para el TDAH pensando que les ayudará a concentrarse o tener un mejor rendimiento. De hecho, un estudio publicado en abril en JAMA Network Open, una de las revistas académicas médicas más prestigiosas en el mundo, reveló que hasta 1 de cada 4 estudiantes de secundaria toma fármacos para el TDAH sin prescripción médica.
Pero los participantes del nuevo estudio que tomaron la medicación se esforzaron más en las pruebas que aquellos que recibieron un placebo, pero la precisión de sus intentos disminuyó. Ni la cognición ni el rendimiento fue mejor.
"Nuestra investigación demuestra que los fármacos que se espera que mejoren el rendimiento cognitivo de los pacientes pueden, en realidad, estar haciendo que los usuarios sanos trabajen más y, al mismo tiempo, produzcan un trabajo de menor calidad en un periodo de tiempo más largo", señaló Elizabeth Bowman, autora principal del estudio.
Para las personas sin TDAH, "tomar estos medicamentos puede motivarlos a rendir más, pero el resultado final no es mejor", expresó a National Geographic Asim Shah, profesor de psiquiatría y ciencias del comportamiento del Baylor College of Medicine.
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Adderall y Ritalin son medicamentos estimulantes, estos ayudan a las personas con TDAH a mejorar la concentración y la atención, y también pueden reducir la hiperactividad y la impulsividad. Estos consiguen controlar los síntomas aumentando la actividad de la norepinefrina y la dopamina en el cerebro.
"Debido a la dopamina que inducen los fármacos, esperábamos ver un aumento de la motivación, y efectivamente motivan a esforzarse más. Sin embargo, descubrimos que este esfuerzo provocaba un pensamiento más errático", señaló Bowman, investigadora de la Universidad de Melbourne.
Para las personas sin TDAH, tomar Ritalin o Adderall como fármacos de estudio puede hacerlos sentir nerviosos y ansiosos, lo que provoca que se centren demasiado en detalles más pequeños y menos importantes, mientras pierden la visión de conjunto, afirmó en un comunicado de prensa Peter Bossaerts, uno de los autores del estudio y catedrático de Neuroeconomía de la Universidad de Cambridge.
El uso a largo plazo de los estimulantes también puede tener efectos negativos en la salud cardiovascular, el aumento de la frecuencia cardíaca y la presión arterial, destacó el doctor Robert Bassett, director médico asociado del Centro de Control de Envenenamientos del Hospital Infantil de Filadelfia.
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