Los padres de niños y recién nacidos podrán proteger a sus hijos del virus respiratorio sincitial (VRS) con una nueva medida preventiva a partir de otoño. La Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA) aprobó el uso de nirsevimab, un anticuerpo que funciona basándose en el concepto de inmunidad pasiva.
Vendido bajo la marca Beyfortus, no es una vacuna. A diferencia de estas que hacen que el sistema inmunitario del organismo genere anticuerpos, el nirsevimab es un anticuerpo preparado de antemano que se adhiere al virus, impidiendo que infecte las células sanas.
El Comité Asesor sobre Prácticas de Inmunización (ACIP), un grupo de expertos que orienta a los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) sobre los protocolos de vacunación, está listo para votar sobre el uso de Nirsevimab, tras haber emitido ya borradores de recomendaciones y consideraciones clínicas.
"La disponibilidad de Beyfortus responde a la apremiante demanda de estrategias que puedan reducir el impacto de la enfermedad por VRS en los niños, sus familias y el sector sanitario", declaró a CNN John Farley, director de la Oficina de Enfermedades Infecciosas del Centro de Evaluación e Investigación de Medicamentos de la FDA.
El VRS es un virus que puede causar infecciones respiratorias graves, especialmente en bebés prematuros o con problemas de corazón o pulmones. La Academia Estadounidense de Pediatría (APA) informa que entre 1% y 3% de los bebés menores de 1 año en los Estados Unidos son hospitalizados cada año debido a una infección por VRS.
¿Qué es y cómo funciona?
Beyfortus es un anticuerpo monoclonal, un tipo de proteína que se fabrica en un laboratorio para imitar la capacidad del sistema inmunológico del cuerpo para combatir los virus.
Este se administra como una inyección única antes de la temporada típica del VRS (otoño e invierno). Además, se permite una segunda dosis para bebés de hasta dos años que siguen en riesgo durante la segunda temporada del VRS. Esto puede ayudar a prevenir la infección del virus en bebés y reducir su riesgo de enfermarse gravemente.
Los ensayos clínicos indican que tiene una eficacia del 70% en la reducción del riesgo de que un bebé necesite visitar al médico por VRS y el 78% en la prevención de hospitalizaciones por VRS en comparación con un placebo, de acuerdo con la FDA.
En los estudios, la terapia fue generalmente segura y bien tolerada. Unos pocos lactantes -menos del 1%- presentaron reacciones cutáneas tras las inyecciones, pero desaparecieron con el tratamiento.
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¿Hay otros medicamentos para tratar el VRS en lactantes?
Beyfortus es el segundo anticuerpo disponible para prevenir a los niños contra el VRS. El otro, llamado palivizumab o Synagis, sólo se ha utilizado para proteger a los bebés más vulnerables: los nacidos prematuramente que tienen menos de 6 meses.
El Synagis dura poco tiempo en el organismo, por lo que los médicos lo administran una vez al mes, empezando justo antes de la temporada del VRS, hasta que haya pasado el riesgo. Sólo es parcialmente eficaz, mantiene a los bebés vulnerables fuera del hospital alrededor del 50% de las veces.
El anticuerpo del nirsevimab se ha estabilizado para que dure más tiempo en el organismo (de cuatro a seis meses) y parece ser más potente.
Además del nirsevimab, la FDA está considerando aprobar la vacuna de Pfizer para mujeres embarazadas. Esta vacuna permitiría que la madre produzca anticuerpos que atraviesan la placenta para proteger al feto y al bebé durante los primeros meses de vida.
Las vacunas también pueden inducir la producción de diferentes tipos de anticuerpos, proporcionando protección más amplia. Si se aprueba, la vacuna de Pfizer podría proteger a los bebés desde el nacimiento, lo que sería útil si la infección aparece fuera de temporada.
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