La Suprema Corte de Wisconsin, que casi anuló la estrecha brecha que le dio la victoria al presidente Joe Biden durante 2020, cambió de manos conservadoras a progresistas, por primera vez en 15 años.
Janet Protasiewicz, quien hizo del derecho al aborto uno de los ejes de su campaña electoral y calificó de "amañados" los mapas de redistribución de distritos elaborados por los republicanos, marcó el inicio de su mandato de 10 años con una ceremonia de toma de posesión en el Capitolio estatal, destacó AP.
La victoria de Protasiewicz tiene un enorme peso en Wisconsin, donde el Tribunal Supremo estatal ha sido la última palabra en algunas de las mayores batallas políticas de la última década.
Te explicamos: ¿Cambio de panorama en Wisconsin? Jueza liberal gana un escaño en la Corte Suprema estatal
El tribunal, controlado por los conservadores, estuvo a un voto de anular la estrecha victoria del presidente Joe Biden en el estado en 2020, aunque Biden aún habría tenido suficientes votos electorales para reclamar la presidencia.
Lejos de mejorar se espera que haya más batallas sobre las normas de votación y las elecciones de 2024, junto con demandas a la prohibición de aborto que hay en el estado, las normas de demarcación política trazadas por los republicanos y más.
Cómo van las cosas en Wisconsin: Republicanos presentan proyecto de ley en Wisconsin para que los maestros porten armas
Aunque es posible que pase algún tiempo antes de que el tribunal se pronuncie sobre algunos temas, se espera que en pocas semanas se presente una nueva demanda contra los mapas de distritos legislativos y congresuales elaborados por el Partido Republicano.
Protasiewicz prometió no ceder a las presiones políticas. "Todos queremos un Wisconsin en el que nuestras libertades estén protegidas", dijo en la ceremonia. "Queremos un Wisconsin con un Tribunal Supremo justo e imparcial. Todos queremos vivir en comunidades seguras. Y todos queremos un Wisconsin en el que todos tengan la misma justicia ante la ley".
Protasiewicz sustituye al juez conservador Pat Roggensack, que lleva 20 años en el cargo, seis de ellos como presidente del Tribunal Supremo.