El sindicato United Auto Workers (UAW) intensificó sus protestas laborales contra los fabricantes de automóviles General Motors (GM) y Stellantis, mientras que Ford parece avanzar hacia una posible resolución.
Shawn Fain, presidente de UAW, anunció el viernes la ampliación de la huelga a todos los centros de distribución de piezas de GM y Stellantis.
Fain indicó que las discusiones contractuales con Ford estaban mostrando signos de progreso, por lo que las protestas laborales no se extenderían para incluir a más de sus trabajadores. Subrayó que la empresa parecía comprometida a finalizar un acuerdo.
Estos avances con Ford han despertado cierto optimismo en cuanto a una rápida resolución del conflicto laboral en ese fabricante de automóviles.
Las protestas laborales ampliadas afectarán ahora a los centros de piezas y distribución de GM y Stellantis en 20 estados. Esta medida puede perturbar considerablemente las operaciones de los concesionarios, en particular sus servicios de reparación, un sector crucial de su negocio que genera beneficios.
Los avances de Ford en la protesta de trabajadores automotrices
Ford, por su parte, está trabajando activamente con la UAW para llegar a un acuerdo mutuamente ventajoso. Esto se produce tras una huelga recientemente evitada en Canadá gracias a un acuerdo provisional entre Ford y el sindicato canadiense Unifor.
Aunque las protestas laborales continuarán en tres líneas de montaje ya afectadas -una planta de camiones de Ford en Michigan, una planta de GM en Missouri y la planta de Stellantis en Toledo-, no se incorporarán más fábricas a la huelga.
La UAW inició las protestas laborales el 15 de septiembre, y la actual ampliación de la huelga a objetivos adicionales anunciada el viernes aumentará el número total de miembros en huelga a más de 18.300.
Es la primera vez que la UAW lanza protestas laborales contra los tres grandes fabricantes de automóviles a la vez. El sindicato afirma que esta nueva estrategia de huelgas selectivas ofrece más flexibilidad y capacidad de presión para futuras acciones en caso de que las empresas no cumplan sus demandas.
La UAW inició las negociaciones exigiendo un aumento salarial inmediato del 20% para sus miembros y un aumento salarial total del 40% a lo largo de los cuatro años de vigencia del contrato.
Nuevas acciones pretenden afectar los concesionarios
Estas nuevas acciones laborales están diseñadas específicamente para afectar a los concesionarios de automóviles.
Los concesionarios, que son franquicias independientes que no pertenecen a las tres grandes empresas, obtienen una parte importante de sus ingresos de las revisiones y reparaciones.
Las protestas laborales en curso, que tienen como objetivo los centros de distribución de piezas de GM y Stellantis, podrían perturbar esta fuente de ingresos, ejerciendo así una presión adicional sobre estas empresas automovilísticas para que cedan ante sus trabajadores.
Ford, que ya ha hecho concesiones en varios frentes, incluidos los niveles salariales y la seguridad laboral, probablemente verá cómo sus centros de servicio de concesionarios funcionan con normalidad.
El sindicato también pretende revertir las concesiones realizadas en negociaciones anteriores, cuando la industria automovilística atravesaba dificultades financieras.
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