El gobierno de Reino Unido anunció el viernes nuevas sanciones en respuesta a las falsas elecciones rusas en las zonas ocupadas de Ucrania.
La Oficina de Asuntos Exteriores, de la Commonwealth y de Desarrollo (FCDO) confirmó en un comunicado que las sanciones se dirigen contra funcionarios rusos implicados en las dudosas elecciones celebradas en territorios ucranianos como Jerson, Zaporizhzhia, Donetsk, Luhansk y la ilegalmente anexionada Crimea.
Las sanciones no sólo afectan a particulares en Rusia, sino también a la Comisión Electoral Central (CEC) rusa. Entre los funcionarios sancionados se encuentra Natalya Budarina, secretaria de la CEC. Las medidas punitivas incluyen la congelación de activos y la prohibición de viajar.
"Las elecciones falsas de Rusia son un intento transparente e inútil de legitimar su control ilegal del territorio soberano de Ucrania. No se pueden celebrar 'elecciones' en el país de otra persona", expresó el secretario de Asuntos Exteriores del Reino Unido, James Cleverly.
Cleverly aclaró la firme postura del Reino Unido, afirmando que el país “nunca reconocerá los reclamos de Rusia sobre territorio ucraniano”.
La FCDO también destacó los intentos deliberados de Rusia de erradicar la cultura y la identidad ucranianas para reforzar su reclamación ilegítima de tierras ucranianas.
Las tácticas de Rusia, como la expedición forzosa de pasaportes rusos y la imposición de la legislación, los medios de comunicación, la educación y la moneda rusas, son una prueba clara de ello. Estas acciones, unidas a las elecciones, violan la integridad territorial de Ucrania y la Carta de las Naciones Unidas.
Esta nueva oleada de sanciones se produce en vísperas de un controvertido día de conmemoración en Rusia, declarado por el presidente ruso Vladimir Putin para celebrar el aniversario de sus anexiones.
Con estas, son ya 1.600 las personas, físicas y jurídicas, incluidas en la lista de sanciones de Reino Unido en represalia por la invasión de Ucrania hace ya 19 meses.
Para Reino Unido las elecciones en Rusia “son otra violación de la integridad territorial de Ucrania y de la Carta de Naciones Unidas”.
