Los militantes del grupo terrorista Hamás prometieron transmitir las ejecuciones de rehenes israelíes en Internet. La historia reciente muestra que prácticamente no hay nada que las empresas de tecnología puedan hacer para evitar que esto suceda.
Las Brigadas Al-Qassam, portavoces del ala militar de Hamás, aseguraron que sus combatientes matarían a los rehenes uno por uno, cada vez que un ataque israelí golpeara una casa en Gaza.
Las advertencias fueron hechas en un mensaje de audio publicado en la cuenta de Telegram del grupo esta semana.
Las ejecuciones, aseguraron los portavoces, se retransmitirían en “audio y video”, aunque no especificaron dónde ni cuándo se mostrarían. Se cree que Hamás secuestró a más de 100 personas, en su mayoría civiles, durante su brutal ataque al sur de Israel. Algunos ya han sido asesinados, según un video revisado por The Washington Post.
La amenaza se remonta a videos de hace casi una década del Estado Islámico en los que se vieron decapitaciones de periodistas, trabajadores humanitarios y otros civiles cautivos.
Pero esos videos fueron pregrabados y editados. La promesa de Hamás de registrar y difundir en vivo las ejecuciones que aún no se han llevado a cabo es nueva y parece calibrada para incitar miedo.
"Toda la estrategia de Hamás es infligir el mayor daño posible y atraer la mayor atención a ese daño, para incitar miedo al público en general. Esta es una de las primeras veces que vemos este brillante contenido propagandístico grabado en tiempo real", comentó al medio Graham Brookie, director senior del Laboratorio de Investigación Forense Digital del Atlantic Council.
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Las ejecuciones de Hamás no podrán ser frenadas en Internet
Los asesinatos transmitidos en vivo en Buffalo y Christchurch, Nueva Zelanda, siguen siendo visibles en la web y han sido reproducidos millones de veces, mucho después de que ocurrieron los asesinatos en masa.
Los esfuerzos de las empresas para detener el acceso a vídeos violentos se han visto obstaculizados por una Internet abierta que facilita ver, guardar y compartir vídeos a velocidad viral. Por eso las estrategias cambiantes de asesinos y propagandistas pueden utilizar una red de servicios distribuidos en línea para garantizar que estos materiales permanezcan siempre a su alcance.
Hamás ya ha utilizado Telegram para compartir videos espantosos de secuestros y asesinatos durante el ataque del fin de semana.
Muchos de los videos presentan toques relativamente sofisticados, como animaciones de títulos de apertura y bandas sonoras estilo película de acción, lo que sugiere que el grupo tiene un flujo de trabajo prediseñado para grabación, edición y publicación.
Algunos de los videos aparecieron en forma editada en línea pocas horas después de que comenzara la emboscada.
"Hamás ha estado muy bien preparado para esto y ha creado sistemas profesionales para difundir su mensaje", agregó Josh Lipowsky, analista de investigación senior del Counter Extremism Project, un grupo de defensa en Washington que rastrea el extremismo en línea.
Algunos investigadores comentaron que esperaban que Hamás publicara cualquier vídeo de ejecución en Telegram, desde donde probablemente se volvería a publicar en sitios principales como X, antes conocido como Twitter, y luego podrían obtener millones de visitas.
Pero el grupo también podría transmitir en vivo las ejecuciones a una plataforma de redes sociales u otro sitio web usando una cuenta desechable, como lo han hecho los asesinos en masa en los últimos años. Luego, esos videos podrían guardarse y volverse a publicar en otros servicios de video, lo que prácticamente garantiza que los clips nunca desaparecerán de la web.