Al menos 500 personas murieron después de que un misil impactara el hospital Al Ahli Arab, en el centro de la ciudad de Gaza.
El Ministerio de Sanidad de Gaza confirmó la información. El hospital, que sirve de refugio a miles de habitantes de la ciudad de Gaza que huyen de los ataques aéreos israelíes desde el norte, fue el epicentro del impacto.
Los habitantes de la ciudad se enfrentan ahora a una grave escasez de alimentos, agua, medicamentos y electricidad.
Tras el ataque, los palestinos se reunieron junto a los restos de sus familiares, trasladados del hospital en ruinas de la ciudad de Gaza al hospital Al-Shifa.
Israel se pronuncia sobre el ataque
Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) se absolvieron de toda implicación en el atentado, atribuyéndolo a un mal funcionamiento de los lanzamientos de la Yihad Islámica Palestina.
Un comunicado de las FDI describía una descarga de cohetes enemigos dirigida contra Israel, que alcanzó involuntariamente el hospital de la ciudad de Gaza.
El primer Ministro israelí, Benjamín Netanyahu, señaló que la responsabilidad era de "los bárbaros terroristas de Gaza".
Sin embargo, las autoridades estadounidenses siguen sin conocer el origen del cohete que impactó el hospital.
El doctor Ghassan Abu Sittah, miembro de Médicos Sin Fronteras, estaba realizando una intervención quirúrgica cuando se produjo la explosión. Relató la desgarradora escena del derrumbe del techo del quirófano y calificó el incidente de "masacre".
La OMS rechaza el ataque
Tras el impacto en el hospital, la Organización Mundial de la Salud (OMS) denunció enérgicamente el atentado.
La OMS pidió "la protección activa inmediata de los civiles y el personal sanitario". La organización reveló que el devastado hospital de la ciudad de Gaza era uno de los 20 sobre los que pesaban órdenes de evacuación del ejército israelí en el norte de Gaza.
Sin embargo, la situación crítica de los pacientes y la escasez de recursos han hecho inviables las evacuaciones.
Según el Organismo de Obras Públicas y Socorro de las Naciones Unidas, el suministro de combustible para los hospitales de la ciudad de Gaza está a punto de agotarse, y queda menos de un día.
En respuesta a la crisis, el presidente de la Autoridad Palestina, Mahmoud Abbas, anunció un periodo de luto de tres días.
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