El sindicato United Auto Workers (UAW) envió a 6.800 empleados de Stellantis a protestar la mañana del lunes en las instalaciones de una planta de camiones Ram.
La planta de ensamblaje de Sterling Heights es la “más grande y la que más dinero genera” de Stellantis, reportó la UAW en un comunicado el lunes.
El sindicato informó que la compañía, que fabrica vehículos bajo las marcas Dodge, Ram, Jeep y Chrysler, tiene “la peor propuesta sobre la mesa” en sus negociaciones sobre salarios, convirtiendo a los trabajadores temporales en trabajadores de tiempo completo y ajustes por costo de vida.
La decisión del sindicato es una maniobra estratégica, que aprovecha la fuerza combinada de los trabajadores para negociar mejores condiciones laborales y escalas salariales en la planta de Ram.
"A pesar de tener los ingresos más altos... los márgenes de beneficio más altos y la mayor cantidad de efectivo en reserva, Stellantis está por detrás de Ford y General Motors a la hora de abordar las demandas de su fuerza laboral de la UAW", afirmó la UAW.
El “ataque sorpresa” de la UAW a Ram
Esta es la segunda protesta “sorpresa” organizada por la UAW. La primera fue en una planta de Ford el 11 de octubre.
“Las negociaciones entre Stellantis y el UAW continúan siendo productivas, aprovechando el impulso de las últimas semanas. Hemos avanzado en la reducción de las brechas en cuestiones importantes”, informó Stellantis el viernes.
Hasta la fecha hay más de 40.000 miembros del UAW sumados a la huelga que inició hace seis semanas. Como consecuencia miles de trabajadores han sido despedidos de Ford, GM y Stellantis.
De acuerdo con Anderson Economic Group, el primer mes de la huelga tuvo un impacto económico de 7.700 millones de dólares.