Padres, autores destacados y la principal editorial de Estados Unidos presentaron una demanda el jueves 30 de noviembre contra las autoridades de Iowa, impugnando una polémica ley que prohíbe cualquier libro con contenido sexual en las aulas y bibliotecas de las escuelas públicas.
La acción legal, respaldada por la casa editorial Penguin Random House y los reconocidos autores Laurie Halse Anderson, John Green, Malinda Lo y Jodi Picoult, alegó que los legisladores violaron la Constitución de Estados Unidos al imponer una prohibición amplia, con una excepción para los textos religiosos.
Adicionalmente, argumentaron que, aunque las restricciones son vagas y podrían aplicarse a cualquier libro que describa una relación romántica, en la práctica la ley se está utilizando selectivamente para prohibir historias relacionadas con la temática LGTBI.
Prohibición de temas como orientación sexual e identidad de género
Esta demanda representa la segunda presentada esta semana contra las restricciones, que entraron en vigor el verano pasado en el estado. Bajo estas restricciones, obras literarias clásicas como '1984' de George Orwell, 'Beloved' de Toni Morrison, y 'The Handmaid's Tale' de Margaret Atwood han sido prohibidas, según informó The Hill.
La normativa impacta a todas las escuelas públicas del estado hasta el final de la secundaria. Además de prohibir cualquier texto que incluya actos sexuales, también se prohíben los libros que aborden temas como la orientación sexual o la identidad de género en las aulas hasta el sexto curso, cuando los alumnos tienen entre 11 y 12 años de edad.
Estas restricciones en Iowa se suman a una serie de medidas aprobadas por legisladores republicanos en otros estados, buscando censurar material que consideran inapropiado para menores en entornos escolares y bibliotecas públicas.
Según informes de la Asociación Estadounidense de Bibliotecas (ALA), los intentos de censurar libros sobre identidad de género, homosexualidad y minorías étnicas y raciales aumentaron en un 20 % en todo el país entre enero y agosto. Se documentaron 695 intentos de censura y quejas contra 1.915 títulos, con el 49 % de los cuestionamientos relacionados con libros en bibliotecas públicas, en comparación con el 16 % en 2022.
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