La Policía Federal Australiana (AFP) muestra su preocupación por el hecho de que niños de tan sólo 12 años estén expuestos al extremismo en línea.
La amenaza aflora cada vez más en plataformas destinadas a ser inocentes patios de recreo, como Roblox, que ahora sirve de caldo de cultivo para ideologías extremistas.
Recientes datos de la AFP revelan un inquietante patrón de extremistas que aprovechan plataformas de juegos populares para adoctrinar a nuevos adeptos.
Impulsados por el fervor ideológico y religioso, estos depredadores digitales integran sus narrativas en la jugabilidad, normalizando sutilmente la violencia.
Roblox, una plataforma de juegos que acoge a más de 65 millones de usuarios diarios, la mitad de ellos menores de 12 años, está bajo escrutinio.
Sus entornos virtuales generados por los usuarios están siendo manipulados para difundir ideologías extremistas y recaudar fondos.
Resulta alarmante que estos escenarios en línea reproduzcan a menudo atrocidades del mundo real, como campos de concentración nazis y zonas de conflicto del Estado Islámico.
En particular, hubo una simulación de los atentados terroristas de Christchurch de 2019.
La AFP sugiere que tales recreaciones pueden deformar el sentido de la realidad de los jugadores, normalizando la violencia y fomentando el comportamiento delictivo dentro del juego.
Para aumentar la ansiedad, estas plataformas han acogido concentraciones virtuales pro palestinas y pro israelíes, que con frecuencia desembocan en violencia virtual al enfrentarse jugadores con puntos de vista opuestos.
La AFP destaca la poderosa influencia que pueden tener estas comunidades en línea, que proporcionan validación social y emocional a las mentes jóvenes.
"Estos grupos e individuos extremistas están utilizando los juegos y las plataformas en línea como un modo de transmitir material violento y propaganda, a través de una gama de ideologías extremistas", advierte la comisaria adjunta de la AFP, Krissy Barrett.
Esta preocupante tendencia ha impulsado a los equipos conjuntos de lucha antiterrorista, entre los que se encuentran la AFP, la policía estatal y territorial y la Comisión contra el Crimen de Nueva Gales del Sur, a intensificar sus esfuerzos para rastrear y mitigar esta actividad extremista en línea.
En respuesta, Roblox reafirma su compromiso de mantener una comunidad segura, civil y diversa.
La plataforma se ha aliado con el Centro sobre Terrorismo, Extremismo y Contraterrorismo (CTEC) del Instituto Middlebury, un instituto preeminente en la lucha contra el terrorismo, y con varios gobiernos y ONG mundiales para frenar la actividad extremista en su plataforma.
A medida que el panorama digital se transforma, también lo hace la tarea de proteger la inocencia de las generaciones más jóvenes. Las plataformas de juegos en línea, antaño un santuario para el disfrute y la creatividad, se sitúan ahora a la vanguardia de una batalla por las mentes de nuestros jóvenes.
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