Los continuos ataques rebeldes en el Mar Rojo y la extensión de algunos de los enfrentamientos al Líbano son motivo de preocupación.
El Secretario de Estado Antony Blinken viajará al Medio Oriente esta semana por cuarta vez desde el ataque del 7 de octubre a Israel, mientras EEUU continúa sus esfuerzos para evitar un conflicto regional más amplio a pesar de las crecientes tensiones desde el Mar Rojo hasta el Líbano.
El principal diplomático de EEUU viajará a Turquía, Jordania, Qatar, los Emiratos Árabes Unidos, Arabia Saudita, Egipto e Israel, con una visita a Cisjordania y una parada adicional en Grecia, dijo el jueves el portavoz del Departamento de Estado, Matthew Miller.
"No esperamos que todas las conversación en este viaje sean fáciles", dijo Miller a los periodistas al anunciar el itinerario antes de la partida de Blinken.
Mientras Israel continúa su esfuerzo para eliminar a Hamas, organización que perpetró el ataque de octubre y es designado como un grupo terrorista por EEUU y la Unión Europea, las ondas de choque de la guerra continúan extendiéndose.
Las tensiones están aumentando en el Mar Rojo, donde las fuerzas hutíes respaldadas por Irán continúan atacando barcos comerciales a pesar de una fuerza de tarea liderada por EEUU destinada a proteger el paso al Canal de Suez. En una declaración conjunta, EEUU, el Reino Unido, Alemania, Australia y varios otros países advirtieron que los hutíes "serán responsables de las consecuencias" si los ataques no se detienen.
La coalición ha derribado hasta ahora 19 drones y misiles en medio de 25 ataques a buques mercantes en el Mar Rojo, dijo a los periodistas el jueves el vicealmirante Brad Cooper, comandante del Comando Central de Fuerzas Navales de EEUU. Pero reconoció que los ataques hutíes continúan "sin cesar".
También ha habido crecientes tensiones entre Israel y el vecino Líbano, desde donde militantes de Hezbolá respaldados por Irán han disparado a puestos y soldados israelíes.
El martes, Hamas dijo que Israel realizó un ataque con drones en la capital libanesa de Beirut que mató a uno de los altos funcionarios del grupo militante.
Como en sus anteriores viajes relámpago a Medio Oriente desde que estalló la guerra, se espera que Blinken transmita el mensaje de que EEUU está del lado de Israel, mientras también presiona al Primer Ministro Benjamín Netanyahu para que reduzca la intensidad de su guerra contra Hamas en Gaza.
Blinken ha abogado por un mayor flujo de ayuda humanitaria a Gaza y ha presionado a las naciones árabes para que ejerzan presión sobre Irán y Hamas y ayuden a liberar a los rehenes.
Según el ministerio de salud de Gaza controlado por Hamas, más de 22.000 personas han fallecido y más de 57.000 heridas, lo que ha generado condenas de grupos de derechos humanos y varias naciones.
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