El presidente Joe Biden se comprometió este viernes a reforzar el control fronterizo, condicionado a la aprobación de un nuevo proyecto de ley bipartidista sobre inmigración.
El proyecto de ley le dota de la autoridad necesaria para mitigar los cruces fronterizos cuando se vea desbordado, y este, está siendo debatido en el Senado.
Sin embargo, esta legislación propuesta suscitó las críticas del expresidente Donald Trump, que la ve como una victoria potencial para su probable competidor en las próximas elecciones de noviembre.
El presidente Biden declaró: "Lo que se ha negociado sería, si se convierte en ley, el conjunto de reformas más duras y justas para asegurar la frontera que jamás hayamos tenido en nuestro país".
"Me daría, como presidente, una nueva autoridad de emergencia para cerrar la frontera cuando se vea abrumada. Y si me dieran esa autoridad, la usaría el día que firme el proyecto de ley".
También argumentó que llegó el momento de tomar medidas correctivas ante la crisis de inmigración.
Propuesta de Biden para reforzar el control fronterizo obtiene apoyo bipartidista
Subrayó: "Asegurar la frontera a través de estas negociaciones es una victoria para Estados Unidos. Para todos los que exigen un control fronterizo más estricto, esta es la manera de hacerlo. Si se toma en serio la crisis fronteriza, apruebe un proyecto de ley bipartidista y yo lo firmaré".
Los legisladores republicanos, sobre todo en la Cámara de Representantes, estipularon que sólo consentirán la ayuda a Ucrania si va acompañada de políticas de inmigración más estrictas.
El año anterior, el gobierno de Biden propuso una solicitud suplementaria que vinculaba la financiación de las fronteras a la ayuda a Ucrania e Israel.
Los negociadores del Senado intensificaron recientemente sus esfuerzos para llegar a un acuerdo sobre estas cuestiones, a pesar del llamamiento de Trump a los republicanos para que rechacen la propuesta bipartidista sobre la frontera.
Nueva legislación de inmigración de Joe Biden
La declaración del presidente Biden coincide con los datos publicados recientemente por el Servicio de Aduanas y Protección de Fronteras de Estados Unidos.
Las estadísticas revelan que los encuentros con inmigrantes indocumentados alcanzaron un máximo sin precedentes en diciembre, superando los 300.000, principalmente en la frontera suroeste.
Sin embargo, los datos preliminares del gobierno indican un descenso significativo de más del 50% en los encuentros fronterizos entre los puertos de entrada de la región suroeste del país, durante la primera quincena de enero.
El Servicio de Aduanas y Protección de Fronteras de Estados Unidos lanzó una advertencia a los posibles infractores: "La entrada ilegal en Estados Unidos pone vidas en peligro. El mensaje es simple: no lo hagas".
