El Centro Nacional de Estadísticas Sanitarias (NCHS) expuso una alarmante cifra: un aumento del 12% de los partos prematuros en EEUU de 2014 a 2022.
Como resultado, la tasa de nacimientos prematuros ronda ahora el 8,7%, presentando notables disparidades raciales y de edad entre las madres afectadas.
¿Qué muestra el estudio?
Analizando los datos, resulta evidente que las madres negras experimentan casi el doble de partos prematuros que sus contrapartes blancas, con tasas del 12,5% y el 7,6% respectivamente. Además, las mujeres mayores de 40 años muestran una mayor incidencia de nacimientos prematuros, con un 12,5%, en comparación con las que se encuentran en la franja de edad de 20 a 29 años, donde la tasa es del 8,23%.
Las conclusiones del informe arrojan luz sobre la creciente crisis de salud materno-infantil en EEUU, una crisis que los expertos advierten que podría verse agravada por las recientes prohibiciones del aborto en los estados del sur y algunos del oeste.
EEUU, como destaca el Fondo de la Commonwealth, ya lucha con una de las tasas de mortalidad materna más altas entre las democracias desarrolladas.
Expresando su preocupación por estas tendencias, Cynthia Gyamfi-Bannerman, especialista en medicina materno-fetal y presidenta electa de la Sociedad de Medicina Materno-Fetal, afirmó:
"Lo importante aquí es que, con toda la investigación que hemos realizado para intentar disminuir los nacimientos prematuros, aún no hemos encontrado la solución..."
Las implicaciones del informe del NCHS son múltiples.
En primer lugar, subraya el problema actual de las altas tasas de nacimientos prematuros en EEUU.
En segundo lugar, aumenta la concienciación sobre los riesgos potenciales ligados a formar una familia más tarde en la vida, una tendencia que se ha hecho más prevalente en la última década.
Por último, saca a la luz las marcadas disparidades raciales entre las mujeres negras y sus contrapartes blancas e hispanas.
¿Qué son los partos prematuros?
El parto prematuro, definido como el nacimiento antes de las 37 semanas, es la principal causa de mortalidad infantil y de trastornos de salud. Los riesgos para la salud, incluida la muerte, las complicaciones graves y las discapacidades, aumentan cuanto antes nace el bebé. Esto es cierto para los bebés nacidos "a término", en particular a las 37 semanas, que se enfrentan a mayores riesgos de salud.
Para el informe, los investigadores del NCHS analizaron los registros de nacimientos desde 2014, el punto más bajo reciente en nacimientos prematuros, hasta 2022, incluyendo todos los nacimientos.
El estudio se centró en los casos de parto único, ya que los partos múltiples suelen ser prematuros.
La investigación descubrió que las tasas de nacimientos prematuros aumentaron un 2% anual, con algunas fluctuaciones durante la pandemia de Covid-19. Esto implica que los factores de estrés social y económico vinculados a muchos nacimientos prematuros podrían estar intensificándose.
Es importante señalar que la tasa comunicada por el NCHS difiere de la tasa de nacimientos prematuros del 10,4% comunicada por March of Dimes, una organización de defensa de los lactantes. March of Dimes, que calificó a EEUU con un D+ por su elevada tasa de nacimientos prematuros, basó sus datos en los nacidos vivos, a diferencia del informe del NCHS, que tuvo en cuenta todos los nacimientos.
Los datos también cubren el periodo post-Dobbs temprano, tras la revocación de Roe v. Wade por parte del tribunal supremo en julio de 2022. Esto llevó a una rápida prohibición del aborto en más de una docena de estados, más que todo en el sur.
