California enfrenta un doble desafío de tormentas fluviales atmosféricas, con fuertes nevadas, vientos intensos y lluvias torrenciales en el pronóstico.
La primera tormenta ya ha causado estragos, y una segunda, posiblemente más potente, se espera que golpee la región el domingo, informó CNN.
Más de 20 millones de californianos, incluyendo a los habitantes de Los Ángeles, San Diego, Sacramento, San Francisco, San José y Oakland, están en alerta por inundaciones.
Se espera que el riesgo persista hasta el viernes por la mañana para el centro y sur de California.
El efecto de El Niño
A pesar de un breve respiro luego de la primera tormenta, los meteorólogos advierten que la segunda está en camino.
El fenómeno de El Niño está redirigiendo la corriente en chorro, poniendo a California en la trayectoria de la tormenta y aprovechando la abundante humedad de los trópicos.
Riesgo de precipitaciones excesivas
La primera tormenta golpeó con fuerza el norte de California y se espera que traiga lluvias constantes y vientos racheados al sur del estado hasta las primeras horas del viernes.
Se pronostican precipitaciones entre 1 y 4 pulgadas en la región sur, con posibilidad de superar una pulgada por hora.
Precauciones y respuesta de emergencia
Ante el riesgo de precipitaciones excesivas, calificado como nivel 2 de 4, las autoridades emitieron avisos de evacuación voluntaria en áreas propensas a inundaciones.
Los servicios de emergencia de la región están en alerta, con 400 efectivos adicionales listos para responder.
Amenaza de nieve en California tras tormentas fluviales
Además de las inundaciones, se espera que caiga nieve en el norte de California y Sierra Nevada a medida que bajen las temperaturas.
La nieve es una adición bienvenida al manto de nieve de California, actualmente sólo al 52% de la media para esta época del año.
El pronóstico para el domingo no es alentador. Se espera que otra potente tormenta fluvial atmosférica azote el sur de California, convirtiéndose potencialmente en la "mayor tormenta de la temporada", según el Servicio Meteorológico Nacional de Los Ángeles.