El Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas aprobó una resolución el lunes que exige un cese al fuego inmediato en la Franja de Gaza, pero la situación no ha cambiado.
Aunque el Consejo de Seguridad de la ONU aprobó una resolución el lunes que exige un cese al fuego inmediato en la Franja de Gaza, queda por ver si tendrá un efecto concreto en la guerra o si simplemente será una declaración política.
La medida, denominada como Resolución 2728, se logró luego de tres intentos fallidos que Estados Unidos había bloqueado. Fue aprobada por 14 votos, después de que Estados Unidos se abstuviera de votar y no emitiera su veto.
La resolución también pide la liberación incondicional de todos los rehenes y el fin de las barreras a la ayuda humanitaria.
El gobierno de Israel condenó la votación. Las primeras indicaciones son que la medida de la ONU ha cambiado poco en el terreno y no ha impulsado un progreso diplomático.
Evaluamos la situación en detalle luego de la resolución.
¿Ha afectado la resolución a los combates?
Altos funcionarios israelíes dijeron que ignorarían el llamado a un cese al fuego, argumentando que era imperativo continuar la guerra hasta que hayan desmantelado el ala militar de Hamás, el grupo militante que lideró el ataque del 7 de octubre contra Israel.
Desde el lunes, no ha habido un cambio aparente en la campaña militar. La fuerza aérea de Israel continúa bombardeando Gaza con ataques y Hamás sigue lanzando ataques.
El ejército de Israel está presionando con una redada en el Hospital Shifa en el norte de Gaza, la mayor instalación médica del territorio, así como su ofensiva en Khan Younis, la ciudad más grande del sur, donde los combates han sido feroces.
¿Qué puede hacer la ONU si Israel no acata la resolución?
El Consejo de Seguridad tiene pocos medios para hacer cumplir sus resoluciones. El consejo puede tomar medidas punitivas, imponiendo sanciones contra los violadores. En el pasado, tales medidas han incluido prohibiciones de viaje, restricciones económicas y embargos de armas.
En este caso, sin embargo, expertos legales dijeron que cualquier medida adicional requeriría una nueva resolución y que aprobarla requeriría el consentimiento de los cinco miembros del consejo con derecho a veto, incluyendo a Estados Unidos, el aliado más firme de Israel.
También puede haber desafíos legales. Mientras que la ONU dice que las resoluciones del Consejo de Seguridad se consideran derecho internacional, expertos legales debaten si todas las resoluciones son vinculantes para los estados miembros, o solo aquellas adoptadas bajo el capítulo VII de la Carta de la ONU, que trata sobre amenazas a la paz. La resolución aprobada el lunes no mencionó explícitamente el Capítulo VII.
Funcionarios de la ONU dijeron que aun así es vinculante para Israel, pero algunos países no estuvieron de acuerdo. Corea del Sur dijo el lunes que la resolución no era "explícitamente coercitiva bajo el Capítulo VII", pero que reflejaba un consenso de la comunidad internacional.
Crucialmente, la embajadora de EEUU ante las Naciones Unidas, Linda Thomas-Greenfield, mantuvo que la resolución no era vinculante. Estados Unidos, que tiene un poder significativo en el Consejo de Seguridad debido a su asiento permanente, probablemente ve la aprobación de la resolución más como un valioso instrumento político que como una orden vinculante, dijeron expertos.
La abstención de EEUU envía una señal poderosa de sus prioridades políticas, aunque, a corto plazo, es poco probable que el Consejo de Seguridad tome más medidas, según Ivo H. Daalder, exembajador de EEUU ante la OTAN.
"Ni Israel ni Hamás van a ser influenciados por una resolución de la ONU", dijo Daalder.
¿Qué pasa con la ayuda humanitaria?
Israel controla el flujo de ayuda a Gaza y después de cinco meses de guerra, los palestinos en Gaza enfrentan una grave crisis de hambre al borde de la hambruna, especialmente en el norte, según la ONU y residentes del territorio.
Grupos de ayuda han culpado a Israel, que anunció y ha ejecutado un asedio del territorio después del 7 de octubre. Dicen que los funcionarios han impedido las entregas de ayuda a través de inspecciones y restricciones estrictas.
Israel argumenta que trabaja para evitar que la ayuda llegue a Hamás y dice que sus funcionarios pueden procesar más ayuda de la que los grupos de ayuda pueden distribuir dentro del territorio. El creciente desorden en Gaza también ha hecho difícil la distribución de ayuda, con algunas caravanas generando situaciones de violencia mortal.
Poco ha cambiado esta semana. El número de camiones de ayuda que ingresaron a Gaza el martes desde los dos cruces fronterizos abiertos para ese fin coincidió aproximadamente con el número promedio diario de cruces este mes, según datos de la ONU. Esa cifra, unos 150 camiones por día, es casi un 70 % menos que cifras comparables de antes del 7 de octubre.
¿Cómo ha afectado la resolución al proceso diplomático?
La brecha entre Israel y Hamás sigue siendo extensa en cuanto a negociaciones destinadas a intermediar un alto al fuego y un intercambio de rehenes por prisioneros palestinos.
Los mediadores han estado en Catar tratando de reducir las diferencias. Pero a última hora del lunes, Hamás rechazó la contrapropuesta más reciente de Israel; y su líder político, en una visita a Teherán, Irán, esta semana, dijo que la resolución de la ONU demostraba que Israel estaba aislado diplomáticamente.
El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, ha argumentado que la resolución retrasó las negociaciones, dando a Hamás ánimos para esperar hasta recibir una oferta con mejores condiciones.
Funcionarios de EEUU e Israel han indicado que el mayor punto de discordia en las conversaciones de cese al fuego recientemente ha sido el número de prisioneros palestinos a ser liberados, en particular aquellos que están cumpliendo largas condenas por violencia contra israelíes.
Matthew Mpoke Bigg - The New York Times.
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