McDonald's declaró este jueves su iniciativa de adquirir la totalidad de sus 225 establecimientos franquiciados en Israel.
Este movimiento sigue la línea de los reconocimientos por parte de la empresa de las perturbaciones operativas causadas por la escalada del conflicto entre Israel y Hamás.
Sellando un acuerdo con Alonyal Limited, el principal operador de franquicias en Israel, McDonald's recuperará la propiedad de los puntos de venta.
Trayectoria de McDonald's en Israel
Omri Padan, el director general detrás de Alonyal, reflexionó sobre su trayectoria de introducción y cultivo de la marca McDonald's en Israel durante más de tres décadas, una empresa que da empleo a más de 5.000 personas en estos puntos de venta.
Con esta adquisición, McDonald's reitera su dedicación al mercado israelí, comprometiéndose a mantener un entorno positivo tanto para su plantilla como para su clientela.
Este cambio estratégico hacia la supervisión directa difiere de la dependencia convencional de McDonald's de los franquiciados locales, que normalmente gozan de un importante margen de maniobra en la gestión de las operaciones.
Impacto comercial de la guerra
La tensión geopolítica incitó boicots contra marcas estadounidenses como McDonald's en varios mercados de Medio Oriente.
El CEO Chris Kempczinski reconoció en una declaración en enero el "significativo impacto comercial" que el conflicto tiene en las operaciones de McDonald's en Medio Oriente.
Este sentimiento tuvo eco en el informe de resultados de febrero de la empresa, insinuando los continuos desafíos que el conflicto plantea a sus perspectivas de negocio.
Al asumir el control directo de sus franquicias en Israel, McDonald's pretende moverse hábilmente por el difícil panorama geopolítico, asegurándose de que sus operaciones se adhieran a los estándares y valores globales de la marca.