El sector de la aviación de Estados Unidos se dirigió mediante una carta este jueves a la administración Biden, abogando por una pausa estratégica en la aprobación de nuevos servicios de vuelos hacia y desde China.
Basan su petición en la preocupación por las "actuales políticas anticompetitivas perjudiciales" de Pekín. Estas políticas, ponen en desventaja a las aerolíneas estadounidenses y a su mano de obra.
Airlines for America, que incluye a compañías líderes como American Airlines, Delta y United, encabezó esta iniciativa junto a varios sindicatos de trabajadores de la aviación, expresaron sus preocupaciones al Secretario de Estado de EEUU, Antony Blinken, y al Secretario de Transporte, Pete Buttigieg.
Consecuencias negativas para los trabajadores de las aerolíneas estadounidenses
La carta subraya que el actual desequilibrio competitivo podría amenazar los medios de subsistencia de unos 315.000 trabajadores de la aviación estadounidenses relacionados con la ruta china.
Destacan los riesgos de permitir que el mercado chino de la aviación se expanda sin control, lo que podría llevar a que las aerolíneas estadounidenses perdieran terreno frente a sus competidoras chinas, afectando los empleos y las empresas estadounidenses.
A principios de este año, Washington decidió permitir a las aerolíneas chinas aumentar sus vuelos directos de pasajeros a EEUU. Esta decisión elevaró el número de viajes semanales de ida y vuelta de 35 a 50 a partir del 31 de marzo.
Este ajuste pretende restablecer gradualmente los enlaces aéreos interrumpidos por la pandemia del Covid-19. Aunque el ajuste sigue representando una reducción respecto a los más de 150 viajes de ida y vuelta semanales permitidos antes de las restricciones impuestas por la pandemia a principios de 2020.
Los transportistas estadounidenses expresaron su descontento por las restricciones de acceso al mercado impuestas por China durante la pandemia.
Las normativas que, según ellos, dificultan las operaciones, el servicio al cliente y el trato a las tripulaciones de las aerolíneas estadounidenses.
Esta disparidad se agravó aún más en 2022, cuando las aerolíneas chinas conservaron el acceso al espacio aéreo ruso.
Ruta que las compañías estadounidenses dejaron de utilizar tras la invasión rusa a Ucrania en febrero. Lo que añadió un tiempo y unos costes significativos a sus vuelos.
El llamamiento de la industria aérea destaca la necesidad de que el gobierno estadounidense desarrolle políticas que protejan a los trabajadores estadounidenses de la aviación, a la industria en general y a los viajeros aéreos.
Respuesta por parte de China
El Ministerio de Asuntos Exteriores de China comentó el viernes que el aumento de vuelos directos fue una decisión mutua (entre EEUU y China), alcanzada durante una reunión entre el líder chino Xi Jinping y el presidente Joe Biden en San Francisco el pasado noviembre.
Señalaron que la mejora de la conectividad aérea fomentaría una mayor interacción y entendimiento entre los pueblos de ambas naciones.