Las delegaciones de Israel y Hamás abandonaron las negociaciones en El Cairo, junto con el director de la CIA, lo que supuso un golpe a las esperanzas de alcanzar pronto un acuerdo.
Las negociaciones de alto nivel sobre rehenes en El Cairo se pusieron en pausa el jueves, según divulgaron funcionarios informados sobre las negociaciones y los medios estatales egipcios, con un funcionario indicando que la ira había estallado entre los participantes por la incursión de Israel en la ciudad de Rafah, en el sur de la Franja de Gaza.
La pausa es un retroceso dado que algunas personas que seguían de cerca las negociaciones habían visto señales de que un acuerdo podría estar al alcance esta semana.
Aun así, un funcionario otro dijo que los negociadores no creían que Hamás o Israel estuvieran abandonando las negociaciones de manera permanente y estaban interpretando la suspensión como una pausa temporal en lugar de un descarrilamiento.
William J. Burns, el director de la CIA y principal negociador estadounidense, y otros altos funcionarios partieron de El Cairo, según múltiples personas. Toda la información fue proveída de manera anónima.
Burns, quien ha estado involucrado en largas sesiones de negociación, había extendido su viaje, moviéndose entre Egipto e Israel el miércoles para reunirse con el primer ministro Benjamín Netanyahu de Israel en un esfuerzo por persuadir a Israel de no descartar la más reciente contrapropuesta de alto el fuego de Hamás y para continuar negociando sobre ella.
Mientras los funcionarios egipcios, cataríes y estadounidenses de nivel medio permanecen en El Cairo para las discusiones, las delegaciones tanto de Hamás como de Israel partieron hoy jueves. Un alto funcionario egipcio le dijo a la televisión estatal que los esfuerzos de mediación aún estaban en curso para cerrar la brecha entre las propuestas más recientes de Israel y Hamás.
Los funcionarios estadounidenses dijeron que creían que las diferencias entre Hamás e Israel aún podrían resolverse, al menos lo suficiente para comenzar la primera fase de las negociaciones sobre rehenes.
Una propuesta pedía que Hamás liberara a los rehenes a cambio de un alto el fuego de 42 días y la liberación de un número mucho mayor de prisioneros palestinos. Esa sería la primera de tres fases de acciones recíprocas de cada lado.
Los negociadores egipcios y de Hamás se han visto enfurecidos por las operaciones militares de Israel en Rafah. Y EEUU ha argumentado que la operación militar está amenazando las conversaciones sobre rehenes. La administración Biden anunció que retendría 3.500 bombas de Israel hasta que terminara las operaciones militares en Rafah.
El lunes, tanques y tropas israelíes tomaron el cruce fronterizo en la ciudad de Gaza, cortando el flujo de ayuda desde Egipto. Los funcionarios estadounidenses estaban deseosos de que la incursión no fuera el comienzo de una invasión terrestre más grande en Rafah, donde cientos de miles de civiles desplazados están hacinados en ciudades de tiendas y refugios temporales en la ciudad.
Los funcionarios israelíes se han mostrado desafiantes, diciendo que la invasión es necesaria para desmantelar a Hamás como fuerza de combate en Rafah.
Farnaz Fassihi - The New York Times.
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