Una mujer de San Diego sufrió una grave violación de su intimidad cuando la aplicación para compartir fotos BeReal a través de su función "Roulette", supuestamente mostró una imagen privada sin su consentimiento.
La mujer, identificada como Kate en las redes sociales, transmitió su conmoción y consternación a través de un vídeo de TikTok a principios de mes que ganó una considerable tracción, atrayendo casi 164.000 visitas en las 24 horas iniciales.
Sin embargo, según la angustiosa experiencia de Kate, la aplicación compartió inadvertidamente una foto privada y comprometedora con su red y, potencialmente, con toda la comunidad BeReal.
Kate reveló en su vídeo: "BeReal acaba de publicar un desnudo mío para que todos lo vean", comentó Kate. Se quedó especialmente atónita, ya que ese día no había utilizado la aplicación. Rápidamente borró la foto y desinstaló la aplicación, pero el daño ya estaba hecho, dejándola visiblemente disgustada por la brecha.
¿De qué trata BeReal Roulette?
Originaria de Europa, la aplicación BeReal se hizo un hueco animando a los usuarios a capturar y compartir fotos espontáneas con doble cámara en momentos aleatorios de cada día, promoviendo una mirada auténtica a la vida cotidiana.
La raíz del problema puede estar en una función experimental conocida como "BeReal Roulette". Esta función, aún en fase beta, escanea de forma autónoma el rollo de la cámara seleccionado por el usuario y publica una foto al azar.
Aunque sigue sin estar claro si esta función fue la responsable de la historia de Kate, su incertidumbre representa importantes preocupaciones sobre la privacidad.
Las cuestiones éticas y técnicas que rodean la funcionalidad de BeReal se encuentran ahora bajo un intenso escrutinio. El debate que se está desarrollando en torno a la privacidad digital y el consentimiento está dando forma a nuevas narrativas sobre los derechos de los usuarios en el ámbito digital.
Consecuencias de este incidente
Las repercusiones de este incidente resonaron en la comunidad BeReal, incitando a varios usuarios, como demuestran los comentarios en el vídeo de Kate, a desinstalar la aplicación temiendo una invasión similar de su privacidad.
Este incidente representa el creciente malestar por el nivel de acceso que tienen las aplicaciones a los datos personales y el alcance de su control sobre los contenidos generados por los usuarios.
La respuesta de BeReal, o la falta de ella, será fundamental para determinar el futuro de la confianza de los usuarios y el cumplimiento de las normas de privacidad esperadas.
Las plataformas como BeReal deben actuar con cautela para proteger tanto la privacidad de sus usuarios como su propia reputación en un panorama digital cada vez más consciente de la privacidad.