El sur de Florida está soportando una ola de calor sin precedentes, pulverizando récords anteriores de temperatura. Miami y Fort Lauderdale alcanzaron recientemente máximas de 95º F (35º C), superando sus máximas históricas de 94º F (34º C). Del mismo modo, West Palm Beach registró la cifra de 98º F (37º C), muy por encima de su anterior récord de 94 grados.
Antes de esta ola de calor, el récord de 94º F (34º C) de Miami se mantenía desde 1995, mientras que la máxima de 94º F (34º C) de Fort Lauderdale se remontaba a 1985. West Palm Beach también batió su récord de 94º F (34º C) de 2008.
Las autoridades meteorológicas emitieron varias alertas debido a la ola de calor extremo. La combinación de temperatura y humedad (conocida como índice de calor) alcanzó niveles peligrosos.
Consejos para mitigar los riesgos
Algunas zonas podrían experimentar índices de calor que podrían llegar a los 110º F (43º C). El Servicio Meteorológico Nacional (NWS) de Miami insiste en la necesidad de que los residentes extremen las precauciones.
Para evitar los riesgos asociados a la ola de calor, las autoridades aconsejan mantenerse hidratado y reducir las actividades al aire libre durante las horas de mayor calor.
También es esencial llevar ropa ligera y utilizar una protección solar adecuada. Y lo que es más importante, subrayan el peligro de dejar a niños o mascotas en vehículos "Nunca deje a niños o mascotas en su vehículo. La temperatura interior puede alcanzar rápidamente niveles mortales de 120º F (49º C)", advirtió el NWS.
Los trabajadores al aire libre deben hacer descansos frecuentes y asegurarse de que las mascotas disponen de abundante agua y sombra para evitar la angustia inducida por el calor.
Impacto en la vida diaria y recomendaciones
Esta ola de calor histórica altera la vida cotidiana de los residentes del sur de Florida. Muchos buscan refugio en ambientes con aire acondicionado para evitar los efectos perjudiciales de la ola de calor extremo.
En consecuencia, los centros comerciales, las bibliotecas y los teatros se convirtieron en santuarios temporales para quienes no disponen de aire acondicionado en casa.
Los meteorólogos siguen de cerca la ola de calor y prevén un ligero descenso de las temperaturas en los próximos días. Sin embargo, la región seguirá enfrentándose al reto de las temperaturas elevadas en un futuro previsible.
Esta ola de calor histórica subraya la importancia de la preparación y de las medidas proactivas para salvaguardar la salud y el bienestar de la comunidad.
