Luego de nueve semanas desde que el buque Dali chocó con el puente Francis Scott Key de Baltimore, 21 miembros de la tripulación aún se encuentran varados en el mar debido a las restricciones de visados y una investigación en curso del FBI.
La tripulación permanece confinada a bordo, desconectada de los canales de comunicación habituales después de que el FBI confiscara sus teléfonos móviles. Aunque recibieron nuevos dispositivos para ponerse en contacto con sus familias, siguen aislados.
Darrell Wilson, representante de Synergy Marine Group, confirmó que el FBI confiscó los teléfonos de la tripulación como parte de su investigación. The Independent buscó comentarios del FBI sobre los motivos de esta acción y los plazos para la devolución de los dispositivos, pero sigue sin haber respuestas.
Investigación de la NTSB
La presidenta de la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte (NTSB), Jennifer Homendy, señaló el carácter sin precedentes del prolongado confinamiento de la tripulación durante una audiencia del Comité de Transporte e Infraestructuras de la Cámara de Representantes.
Los hombres, en su mayoría de la India y uno de Sri Lanka, llevan en el barco desde el día anterior a su viaje previsto de 30 días a Colombo, Sri Lanka.
Las conclusiones preliminares de la NTSB revelaron que el Dali sufrió dos apagones antes de salir del puerto de Baltimore y otros dos el 26 de marzo, el día del accidente.
Diferentes causas provocaron estos apagones. Los dos iniciales se produjeron debido al mantenimiento rutinario del puerto, pero los dos posteriores, que causaron una pérdida catastrófica del gobierno, estuvieron relacionados con disparos inesperados de los disyuntores.
En la madrugada del 26 de marzo, cuando el buque se aproximaba al puente de Baltimore, un apagón hizo que perdiera el control y colisionara con la estructura.
Este suceso provocó que siete trabajadores, que se encontraban en lo alto del puente, se precipitaran al río Patapsco. Los equipos de rescate salvaron a uno, pero otros seis perdieron la vida.
Un inspector en el lugar, que también estaba en el puente de Baltimore, logró correr a través de un tramo de la estructura para ponerse a salvo.
Preocupaciones del Sindicato de Oficiales Marítimos de Singapur
Representantes del Sindicato de Oficiales Marítimos de Singapur expresó su preocupación por la prolongada detención de la tripulación del Dali.
Gwee Guo Dua, portavoz del sindicato, declaró que los visados de muchos miembros de la tripulación expiaron durante su estancia forzosa. El sindicato pidió un permiso urgente para bajar a tierra y la devolución de los teléfonos incautados para ayudar a mejorar la decaída moral.
Synergy Marine Group asegura que hay representantes en el sitio, en constante contacto con la tripulación para asegurarse de que están bien abastecidos y atendidos. Sin embargo, el futuro de la tripulación sigue siendo incierto ya que participan activamente en la investigación en curso.
Wilson comentó a The Independent: "No estoy seguro acerca de los pases costeros. El barco se dirigía a un largo viaje y tenía muchos suministros a bordo. La empresa cuenta con representantes en el lugar que han estado en contacto constante con la tripulación para garantizar que estén bien atendidos y bien abastecidos".
En este momento, no sé cuánto tiempo permanecerá la tripulación a bordo, ya que son parte de la investigación en curso y están ayudando en ese proceso".
El Comando Unificado, estima que el Dali regresará al puerto de Baltimore en el transcurso de la próxima semana. Hasta entonces, el barco permanece anclado en su posición desde el incidente, con la tripulación abordo y en medio de investigaciones.