Manifestantes propalestinos vandalizaron este miércoles lugares relacionados con el Museo de Brooklyn y las Naciones Unidas. Pintura roja adornaba las entradas, simbolizando la oposición al conflicto de Gaza en el que participan Israel y Hamás.
El alcalde de Nueva York, Eric Adams, se refirió a ello en las redes sociales, señalando que la policía está investigando después de que las residencias de la directora del Museo de Brooklyn, Anne Pasternak, y de miembros de la junta directiva fueran pintarrajeadas.
Las fotos mostraban un edificio de ladrillo pintado de rojo con una pancarta que tachaba a Pasternak y al Museo de Brooklyn de "sionistas supremacistas blancos".
“Esta no es una protesta pacífica ni libertad de expresión. Esto es un crimen y es un antisemitismo abierto e inaceptable”, escribió Adams, enviando su solidaridad a Pasternak y a los miembros de la junta directiva del museo.
"Estas acciones nunca serán toleradas en la ciudad de Nueva York por ningún motivo", agregó Adams.
Pronunciamiento del Museo de Brooklyn
El movimiento que organiza la protesta, Within Our Lifetime, ha emitido una declaración en la que condena a los dirigentes y simpatizantes del museo por su implicación en el conflicto.
El museo expresó su consternación por los incidentes. En un comunicado, el portavoz Taylor Maatman confirmó que se había presentado una denuncia policial. "Estamos profundamente preocupados por estos horribles actos de vandalismo dirigidos contra la dirección del museo", declaró.
Además, se arrojó pintura roja contra edificios relacionados con el consulado alemán y la Misión Permanente de Observación del Estado de Palestina ante las Naciones Unidas. Volantes criticando a la Autoridad Palestina y a su presidente, Mahmoud Abbas, ensuciaron los terrenos fuera de este último
El vandalismo se produce después de una importante protesta en el Museo de Brooklyn el mes pasado, donde cientos de manifestantes instalaron tiendas de campaña en el vestíbulo y desplegaron una pancarta "Palestina libre" desde la azotea. La intervención policial se saldó con múltiples detenciones.
El interventor municipal Brad Lander condenó las protestas, reconociendo al Museo de Brooklyn su postura progresista sobre "el poder, el colonialismo, el racismo y el papel del arte". En las redes sociales, señaló: "Los cobardes que hicieron esto están sobrepasando la línea del antisemitismo, dañando la causa que dicen cuidar y haciendo que todo el mundo esté menos seguro".
El Museo de Brooklyn se encuentra al borde de Prospect Park, en Park Slope, Brooklyn, un barrio conocido por su comunidad diversa. Esta ubicación añade capas de complejidad y sensibilidad a la cuestión que nos ocupa.