Neurocientíficos de la Universidad de Búfalo, EEUU, observaron que los adultos diagnosticados con esclerosis múltiple que dedican más tiempo a jugar a videojuegos tienden a tener un mejor funcionamiento neuropsicológico.
Los participantes, con una edad promedio de 45 años, informaron que juegan a videojuegos una media de cinco horas por semana, con un rango que va de 0 a 40 horas.
En su estudio de 42 adultos (34 mujeres), se demostró que los jugadores mejoraron su aprendizaje visoespacial, la memoria a corto plazo y el funcionamiento ejecutivo.
Impacto de los videojuegos en la esclerosis múltiple
La esclerosis múltiple es una enfermedad en la que el sistema inmunológico ataca las cubiertas protectoras de las fibras nerviosas, causando debilidad muscular, entumecimiento, dolor, fatiga, pérdida de coordinación, alteraciones de la visión, deterioro cognitivo y otros síntomas.
En 2022, se reportó que esta enfermedad incurable afectaba a 2.8 millones de personas a nivel mundial.
Reserva cognitiva y actividades estimulantes
Los autores del estudio, publicado recientemente en Journal of Cognitive Enhancement, observaron que participar en actividades estimulantes como el ocio cognitivo, la educación y los logros ocupacionales puede ayudar al cerebro a desarrollar su capacidad para adaptarse y encontrar formas alternativas de funcionamiento para compensar el daño causado por la enfermedad.
Esta capacidad, conocida como reserva cognitiva, podría ayudar a las personas a ser más resistentes al deterioro cognitivo.
Los videojuegos como herramienta cognitiva
Los investigadores partieron de la hipótesis de que los videojuegos podrían ser una de estas actividades estimulantes debido a su naturaleza divertida y cognitivamente desafiante.
Un estudio publicado en 2019 demostró que jugar a “Super Mario” se asoció con aumentos en el volumen de materia gris del cerebro y cambios funcionales en varias regiones cerebrales.
Asimismo, una investigación reciente concluyó que jugar a “Super Mario Odyssey” en 3D provoca una reducción significativa de los síntomas del trastorno depresivo mayor (TDM).
Resultados del estudio y conclusiones
Con base en estos antecedentes, los científicos consideraron que las personas con esclerosis múltiple que pasan más tiempo jugando a videojuegos tendrían un mejor rendimiento neuropsicológico.
Un grupo de 32 participantes informó haber completado al menos un videojuego durante su edad adulta, y 24 de ellos habían jugado regularmente en los últimos tres meses.
Los participantes que informaron haber jugado a videojuegos durante más horas tendieron a mostrar un mejor rendimiento cognitivo general, incluyendo un mejor funcionamiento ejecutivo, memoria a corto plazo y habilidades de aprendizaje visoespacial y verbal.
Además, las horas dedicadas a jugar a videojuegos ayudaron a desarrollar mejor estas capacidades cognitivas que algunos factores tradicionalmente considerados beneficiosos para la reserva cognitiva.
Posible relación entre habilidades cognitivas y disfrute de videojuegos
Los investigadores señalaron que sus hallazgos sugieren que "jugar a videojuegos de manera constante durante la edad adulta se asocia con mejores resultados cognitivos en las personas con esclerosis múltiple, particularmente en los dominios del nuevo aprendizaje y el funcionamiento ejecutivo".
No obstante, los autores del estudio advirtieron que, aunque sus hallazgos arrojan luz sobre los vínculos entre los videojuegos y el funcionamiento neuropsicológico en adultos con esclerosis múltiple, el diseño del estudio no permite ser concluyentes sobre esta cuestión en términos de causalidad.
Subrayaron que, si bien jugar puede ayudar a prevenir el deterioro cognitivo, también es posible que las personas con mejores capacidades cognitivas sean más capaces de jugar y disfrutar de los videojuegos.