La NASA y Boeing anunciaron el viernes el retraso del regreso de la cápsula Boeing Starliner desde la Estación Espacial Internacional (EEI). Originalmente, los astronautas Butch Wilmore y Suni Williams despegaron hacia la ISS a bordo de la Starliner el 5 de junio.
Complicaciones en el Boeing de la NASA
Varias complicaciones en ruta hacia la ISS, entre ellas una parada inesperada de cinco propulsores y múltiples fugas de helio, exigen revisiones y ajustes exhaustivos. La NASA declaró que el equipo de la misión necesita tiempo adicional para evaluar los datos del sistema de propulsión.
Steve Stich, director del Programa de Tripulación Comercial de la NASA, declarando: "Nos estamos tomando nuestro tiempo, siguiendo nuestro proceso estándar de gestión de la misión, y dejando que los datos impulsen nuestra toma de decisiones en relación con la gestión de las pequeñas fugas del sistema de helio y el rendimiento de los propulsores."
La cápsula Starliner, diseñada para permanecer acoplada hasta 45 días, servirá de apoyo a los próximos paseos espaciales fuera de la estación espacial, uno de los cuales está previsto para el 2 de julio, por lo que permanecerá acoplada hasta después de esa fecha.
Los responsables confirmaron su intención de mantener el Starliner atracado de forma segura mientras los equipos en tierra trabajan para comprender a fondo y resolver los problemas del propulsor y de la fuga de helio. Stich aseguró que el vehículo sigue estando seguro y equipado para completar su viaje de regreso a la Tierra.
Expresando su confianza en la resistencia de la nave, Stich señaló: "Hasta ahora, no vemos ningún escenario en el que el Starliner no pueda traer a Butch y Suni a casa".
NASA y Boeing vigilan a la nave espacial Starline
La NASA y Boeing siguen vigilando de cerca la nave espacial. En caso de que se produjera una emergencia en la ISS que requiriera una rápida evacuación de la tripulación, el Starliner sigue autorizado para regresar inmediatamente. Stich reiteró que el vehículo está preparado para cualquier exigencia que pueda surgir.
A pesar de los continuos problemas técnicos, los comentarios de Wilmore y Williams sobre su experiencia a bordo del Starliner fueron positivos.
Mark Nappi, vicepresidente y director del programa de la tripulación comercial de Boeing, elogió las oportunidades de aprendizaje que ofrece la prueba de vuelo de la tripulación, afirmando: "(Los astronautas) saben que cada aprendizaje que hagamos en la prueba de vuelo de la tripulación mejorará y perfeccionará nuestra experiencia para futuras tripulaciones."
Aunque estos retrasos parezcan contratiempos, el meticuloso enfoque refleja la dedicación de la NASA y Boeing a la seguridad y la precisión.