El Tribunal Popular Supremo, la Fiscalía Popular Suprema y los ministerios de Seguridad Pública, Seguridad Estatal y Justicia de China anunciaron este viernes una serie de directrices para castigar penalmente a los separatistas que promuevan la independencia de Taiwán.
Condenas específicas en China para delitos de secesión
Estas disposiciones, basadas en la legislación actual, establecen normas detalladas para las condenas y castigos de aquellos que inciten o lleven a cabo la secesión, proporcionando así una guía clara para el sistema judicial en la investigación y juicio de estos casos.
El documento especifica que las personas que organicen, conspiren o realicen planes de "independencia de jure" se considerarán penalmente responsables.
Además, aquellos que actúen en complicidad con instituciones, organizaciones o personas extranjeras en la comisión de estos delitos recibirán castigos más severos.
Penas extremas para los delitos graves
Según el artículo 6 del documento, los culpables de división del Estado pueden enfrentarse a la pena de muerte si sus acciones causan un daño particularmente grave al Estado y al pueblo, o si las circunstancias son especialmente serias.
No obstante, aquellos acusados que se retracten voluntariamente de su postura separatista, cesen sus actividades y tomen medidas para mitigar o revertir el daño, serán exonerados o no enjuiciados.
Implementación inmediata de las directrices
Las directrices entrarán en vigor de inmediato y se insta a las autoridades pertinentes a castigar severamente a los elementos intransigentes para salvaguardar la soberanía nacional y la integridad territorial.
Taiwán se autogobierna desde 1949, pero China la considera parte inalienable de su territorio, y la mayoría de los países, incluyendo Rusia, reconocen a la isla como parte integral de la República Popular China.