Cuatro personas murieron y otras nueve resultaron heridas después de que un vehículo se estrellara contra un salón de belleza en Nueva York el viernes, dijeron las autoridades.
El incidente ocurrió a las 4:42 p.m. hora local en el Hawaii Nail & Spa en Grand Avenue en Deer Park en el condado de Suffolk.
El vehículo atravesó el salón de belleza
Dominic Albanese, tercer jefe adjunto del Cuerpo de Bomberos Voluntarios de Deer Park, describió la escena. "Un vehículo atravesó el edificio, lo atravesó completamente", informó Albanese.
La colisión se cobró cuatro vidas en el lugar, mientras que otras nueve personas fueron trasladadas de urgencia a hospitales cercanos. Entre los heridos, una persona requirió traslado aéreo debido a lesiones críticas.
Testigos presenciales describieron los acontecimientos que condujeron al choque. Según sus relatos, el conductor salió del aparcamiento de Kohl's situado al otro lado de la calle, dio un volantazo alrededor de los vehículos, perdió el control y se estrelló contra el salón de manicura.
El testigo Eric Pérez describió vívidamente el impacto: "No es un accidente de coche. Se oyen cristales romperse, no metal contra metal. Es un sonido diferente".
El conductor se encontraba en estado de embriaguez
Las autoridades confirmaron que el conductor, que también resultó herido, se enfrenta ahora a cargos por conducir en estado de embriaguez (DWI). La investigación sobre la causa exacta de la colisión continúa.
Mientras tanto, el vehículo permaneció atascado en la parte trasera del salón durante horas mientras unos 150 bomberos y personal de emergencias trabajaban para controlar el caos.
Al menos dos de los nueve heridos eran clientes del salón. Virginia García relató la aterradora experiencia de su sobrina de 20 años. "La señora que estaba sentada a su lado murió.
Estaba más nerviosa porque cuando vio eso, se dio cuenta de que Dios le había salvado la vida", dijo García, señalando que su sobrina probablemente sufrió fracturas óseas.
No todos los clientes del salón fueron tan afortunados. Jasmin Darbouze, una clienta habitual con una cita fija el viernes a las 16:30, compartió sus emociones al conocer la noticia. "Ni siquiera sé quién se ha ido. No dejo de imaginarme sus caras en mi cabeza", se lamentó Darbouze.
Los nombres de los fallecidos no se hicieron públicos, a la espera de las notificaciones de las familias.