Un despegue rutinario de un avión de American Airlines se convirtió en una situación tensa el 10 de julio en el Aeropuerto Internacional de Tampa, los neumáticos reventaron justo cuando la aeronave alcanzaba la velocidad necesaria.
El vuelo 590 de American Airlines se encontró con un problema crítico cuando se preparaba para despegar, lo que dejó al avión en tierra y requirió una respuesta inmediata.
Este fallo mecánico obligó al piloto a realizar una parada de emergencia cerca del final de la pista. Su rapidez mental bajo presión evitó un desastre potencial.
Equipos de emergencia evaluaron los daños y garantizaron la seguridad
Los equipos de emergencia llegaron rápidamente al lugar de los hechos para evaluar los daños y garantizar la seguridad de todos a bordo.
Gracias a su rápida actuación, se evitó una catástrofe potencial. Los 176 pasajeros y los seis miembros de la tripulación salieron ilesos del avión, lo que demuestra la eficacia de los protocolos de emergencia establecidos.
American Airlines emitió un comunicado después del incidente
American Airlines emitió un comunicado poco después del incidente, reforzando su compromiso con la seguridad. "La seguridad de nuestros pasajeros y tripulación es nuestra máxima prioridad.
Estamos trabajando estrechamente con las autoridades aeroportuarias y los fabricantes para garantizar que se toman todas las medidas necesarias para evitar futuros incidentes", rezaba el comunicado.
La Administración Federal de Aviación (FAA) confirmó que el reventón de un neumático fue la causa principal del incidente. Esta avería retrasó temporalmente las operaciones del aeropuerto mientras la pista afectada se sometía a comprobaciones de seguridad antes de que el avión fuera remolcado con seguridad a un lugar más adecuado.