En una final disputada en el Hard Rock Stadium de Miami, Argentina salió victoriosa y se aseguró el título de la Copa América al derrotar a Colombia por 1-0 en la prórroga.
Este triunfo supuso el 16º título de Copa América para Argentina, lo que la convierte en la selección más premiada de la historia del torneo, superando a Uruguay.
Despedidas emotivas y lesiones
La noche fue especialmente memorable por la emotiva despedida de Ángel Di María de la selección. Además, Lionel Messi abandonó el campo entre lágrimas debido a una lesión, lo que aumentó el peso emocional de la noche.
La tensión en el campo culminó con un gol de Lautaro Martínez en el último minuto.
Dinámica intensa del partido de Argentina y Colombia
Colombia dominó los primeros compases del partido, creando importantes ocasiones. Emiliano Martínez, guardameta argentino, se enfrentó a serias amenazas en la primera media hora. Un disparo lejano de Luis Díaz, un remate de Jhon Córdoba y un cabezazo de Carlos Cuesta mostraron las intenciones de Colombia.
A pesar de un comienzo lento, Argentina empezó a recuperar el ritmo a los 20 minutos de juego. El intento de disparo de Messi, que se desvió en Julián Álvarez, marcó la primera jugada ofensiva sustancial de Argentina.
Segundo tiempo del partido
La segunda parte se volvió cada vez más física, con un juego menos fluido. La polémica estalló cuando el árbitro desestimó las apelaciones de penalti de Argentina.
La situación empeoró para Argentina con la eventual sustitución de Messi por lesión, lo que afectó profundamente a los aficionados de todo el mundo. Gonzalo Montiel también salió, y a Nicolás González le anularon un gol
A pesar de estos contratiempos, la entrada de González inyectó nueva vida al equipo, enviando el partido a la prórroga.
El drama de la prórroga
Durante la primera parte de la prórroga, Nicolás González tuvo una clara oportunidad de adelantar a Argentina, pero el portero colombiano, Camilo Vargas, bloqueó el intento. La persistencia de Argentina brilló y Lautaro Martínez rompió el empate.
Martínez, máximo goleador del torneo, capitalizó un preciso pase de Giovani Lo Celso con un remate clínico, asegurando la victoria de Argentina por 1-0. El gol, marcado por la precisión y la sincronización, confirmó el regreso de Argentina a la gloria de la Copa América.
Victoria de Argentina
Este triunfo añadió un prestigioso título a la ilustre historia futbolística de Argentina y puso de manifiesto la resistencia, la habilidad y la profundidad emocional del equipo.
A pesar de los altibajos del partido, Argentina triunfó, reafirmando su lugar en la cima del fútbol sudamericano.