El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, declaró este miércoles en una reunión conjunta del Congreso de Estados Unidos. El evento atrajo a cientos de manifestantes y puso de relieve la marcada división entre republicanos y demócratas en su enfoque de la devastadora guerra en Gaza.
Netanyahu, una figura política divisiva antes de que comenzara el conflicto, se enfrenta a una disidencia cada vez más profunda en su país, donde dos tercios de los israelíes quieren que deje el cargo.
En pleno Congreso, el ministro israelí presentó la guerra no sólo como un conflicto contra Hamás, sino contra Irán y sus aliados, argumentando que la lucha de Israel también protege a Estados Unidos.
También renunció que Irán es la causa fundamental de todas las guerras, el caos y el terrorismo en Oriente Medio, y volvió a afirmar que Estados Unidos e Israel están inextricablemente vinculados en la batalla por derrotar a Irán.
Hizo referencia a la crisis de los rehenes en Irán de 1979 y describió la lucha de Israel contra Hamás, Hezbolá y otros grupos respaldados por Irán como un servicio heroico no sólo a la defensa de Israel, sino también a la de Estados Unidos.
En un intento de vincular las guerras de Israel con el destino de Estados Unidos, Netanyahu dijo a los legisladores estadounidenses que, si Israel no gana su batalla, “Estados Unidos es el próximo… Y les diré qué más viene después: la capacidad de todas las democracias para luchar contra el terrorismo. Eso es lo que está en juego”, comentó.
Netanyahu en el Congreso llamó “idiotas” a los protestantes
Sin pruebas, Netanyahu acusó a los manifestantes que protestaban contra su discurso de ser agentes financiados por Irán que buscaban demonizar a Israel.
“Por lo que sabemos, Irán está financiando las protestas antiisraelíes que están teniendo lugar ahora mismo afuera de este edificio”, dijo Netanyahu.
"Ustedes se han convertido oficialmente en los idiotas útiles de Irán", dijo Netanyahu en medio de fervientes aplausos en el Congreso.
Este miércoles miles de manifestantes se congregaron en Union Station y derribaron una bandera estadounidense en la entrada principal alrededor de las 3:00 p.m. La policía de parques de EEUU y la policía de DC agarraron a los manifestantes y rodearon la asta de la bandera. Docenas de manifestantes los rodearon. No quedó claro de inmediato si alguien fue arrestado.



Sobre las amenazas de la CPI
Netanyahu calificó de peligrosa difamación la posible acusación de la Corte Penal Internacional contra él y el ministro de Defensa, Yoav Gallant, y advirtió que sentaría un precedente perjudicial para las democracias occidentales en otras partes y “ataría las manos” de los Estados que intentan derrotar a los terroristas.
Sin embargo, numerosos gobiernos amigos en Occidente, desde Australia hasta España y Francia, han apoyado el caso de la CPI y la independencia de su trabajo.
Israel ha enfrentado duras críticas y aislamiento internacional por la forma en que ha llevado adelante su guerra en Gaza –ha enfrentado repetidos llamados de Estados Unidos y otros aliados occidentales para limitar las bajas civiles y permitir la entrada de la ayuda que se necesita desesperadamente– y Netanyahu parece estar tratando de desviar la atención de eso.
En la Franja de Gaza, su gobierno de derecha se acerca a los 10 meses de guerra, con un saldo de más de 39.000 muertos palestinos, según los funcionarios de salud locales, y se enfrenta a críticas generalizadas por el desastre humanitario que ha desatado el conflicto.