La economía de Estados Unidos creció a una tasa anual de 2.8% en el segundo trimestre de 2024, según nuevos datos del Departamento de Comercio publicados el jueves 25 de julio.
Los economistas tenían la expectativa de un crecimiento del PIB a una tasa de 1.9% en el periodo de abril y junio, esto era un poco más que el crecimiento del 1.4% que registró la economía estadounidense en el primer trimestre del año.
Los consumidores y negocios ayudaron a impulsar la economía
De acuedo al informe del Departamento de Comercio, los sectores que más contribuyeron a impulsar el crecimiento económico de Estados Unidos fueron los consumidores y los neegocios, esto pese a la presión por las altas tasas de interés.
En este sentido, el reporte destaca que el crecimiento de la economía en este periodo se aceleró gracias a que las pequeñas y medianas empresas incrementaron sus inventarios.
En términos generales, el estado de la economía estadounidense está siendo empujado por la campaña presidencial y aunque la inflación muestra una desaceleración todavía no llega a la meta de la Reserva Federal que es del 2%.
Los precios de los productos y servicios, en este momento, todavía permanecen por arriba de los previos a la pandemia del covid-19.
Las tasas de interés y las expectativas
La subida de las tasas de interés es lo que mantiene en vilo a la economía de Estados Unidos. Por ahora, los economistas esperan que la Reserva Federal tome una decisión con respecto a los tipos de interés en su última reunión del año que se hará en septiembre.
Desde mediados de 2022 hasta el 2023, el crecimiento anualizado del producto interno bruto de Estados Unidos, según explica The Associated Press, había alcanzado su punto máximo de un 2% en al menos seis trimestres consecutivos.
Para destacar el buen camino por el que va la economía de Estados Unidos, durante los últimos dos trimestres de 2023, el PIB creció a tasas de 4.9% y 3.4%.
Por ahora, solo queda esperar y ver cómo avanza el estado de la economía en los próximos días.
Puedes leer: FMI recomienda a EEUU subir impuestos y retrasar la reducción de las tasas de interés hasta finales 2024