La entrenadora de fútbol femenino de Canadá, Bev Priestman, fue suspendida y eliminada del equipo para los Juegos Olímpicos de París a raíz de un escándalo de espionaje con drones el viernes.
Las jugadoras se no vieron implicadas en la sanción
Kevin Blue, director general y secretario general de Canada Soccer, aseguró que las jugadoras no estaban implicados en conductas poco éticas en los Juegos de París. Mientras tanto, el equipo se entrena en Saint-Etienne, protegido de la mirada pública pero envuelto en una creciente preocupación.
"Al enfrentarnos a una posible deficiencia ética sistémica, nos sometemos a un proceso de rehabilitación doloroso pero necesario", declaró Blue. El futuro de Priestman en el equipo sigue siendo incierto, a la espera de una investigación exhaustiva.
David Shoemaker, director general del Comité Olímpico Canadiense (COC), reveló que Priestman podría haber estado al tanto de los drones utilizados para vigilar las sesiones de entrenamiento de Nueva Zelanda en Francia, acusaciones que ella niega con vehemencia.
El escándalo podría extenderse también al equipo nacional masculino. Blue insinuó un incidente similar con drones durante la Copa América. Aunque al parecer no comprometió la integridad del torneo, los detalles siguen sin revelarse. El seleccionador masculino, Jesse Marsch, fue informado posteriormente y desde entonces ha condenado la práctica.
A pesar del revuelo, las canadienses dieron muestras de resistencia y derrotaron a Nueva Zelanda por 2-1 en su estreno olímpico bajo la dirección del seleccionador interino Andy Spence. Sin embargo, esta victoria se vio empañada por el anuncio de la suspensión de Priestman para el resto del torneo, hecho apenas unas horas después del partido.
Espionaje al equipo de Nueva Zelanda
La polémica surgió después de que dos miembros del personal del equipo supuestamente utilizaran un dron para infiltrarse en el entrenamiento de Nueva Zelanda. Tanto la FIFA como el Comité Olímpico Internacional están investigando el incidente, lo que añade más gravedad a la situación.
Tras la aparición de más detalles, se tomó la decisión de suspender a Priestman basándose en amplias consideraciones. "La información proporcionó razones para considerar que el comportamiento podría ser sistémico", explicó Blue.
"Aunque nos reservamos el juicio hasta que concluya la investigación, la nueva información concreta llevó a suspender a Priestman". Los responsables de la federación informaron a los jugadores el viernes durante esta coyuntura crítica.
Priestman, dirigiéndose brevemente a los medios de comunicación el miércoles, expresó su pesar: "Mi reacción fue que este programa ha defraudado al país. Por eso tomé medidas proactivas para hacer lo que me parecía correcto. Independientemente de los detalles, en última instancia soy responsable".
A lo largo de su mandato, Priestman alcanzó notables cotas, incluida una histórica medalla de oro en los Juegos Olímpicos de 2021, pero también se ha enfrentado a momentos bajos como la eliminación en la fase de grupos de la Copa Mundial Femenina del año pasado.