El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, le pidió al primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, que acepte retirar las fuerzas del Ejército israelí de una zona de 1 a 2 kilómetros a lo largo de la frontera entre Egipto y la Franja de Gaza.
Esta retirada formaría parte de la primera fase del acuerdo de liberación de rehenes y establecimiento de un alto el fuego en la Franja de Gaza, según informaron funcionarios israelíes al medio Axios.
Esta solicitud del presidente Biden se debe a que la presencia del Ejército de Defensa de Israel (FDI) en dicha área se convirtió en un punto de discordia crucial en las negociaciones para alcanzar un acuerdo. El mandatario estadounidense argumentó que aceptar la propuesta podría facilitar el avance de las negociaciones.
A través de una llamada telefónica, Netanyahu aceptó parcialmente la petición y accedió a reubicar las fuerzas israelíes a lo largo de la frontera, conocida como el corredor Filadelfia.
Los ojos en la posición de Hamás
Tras el acuerdo parcial con Estados Unidos, las fuentes citadas por Axios indicaron que ahora Egipto tendría que presentar los nuevos mapas del despliegue de las FDI al grupo terrorista Hamás.
No obstante, expresaron dudas sobre la disposición de la organización islámica a aceptar esta nueva disposición, aunque reconocieron que lograr concesiones en esta área es clave para el progreso de las negociaciones.
Cautela y esperanza tras el pedido de Biden a Netanyahu
"Las FDI están desplegadas a lo largo del corredor de Filadelfia. El primer ministro defiende el principio de que esta situación continuará", dijo un asistente de Netanyahu.
"No hacemos comentarios sobre las discusiones diplomáticas y quienes lo hacen de segunda mano ponen en peligro los esfuerzos para concluir un acuerdo y traer a los rehenes a casa. En todas las cuestiones, nuestra posición es clara y firme de que los términos del acuerdo el acuerdo debe implementarse en su totalidad, nada más y nada menos", dijo un vocero del Consejo de Seguridad Nacional al medio.
Por su parte, el portavoz de la Casa Blanca, John Kirby, señaló que el director de la CIA, Bill Burns, se unió a las conversaciones en El Cairo el viernes, lo que subraya la importancia que Estados Unidos otorga a la resolución de este conflicto.
Kirby afirmó a los periodistas que las conversaciones estaban avanzando de manera constructiva y que era crucial mantener este impulso positivo.
Las negociaciones continúan más allá del pedido de la intervención de Biden
Además, se espera que se celebre una nueva ronda de negociaciones el domingo en la capital egipcia, que contará con la participación del primer ministro de Qatar, Mohammed bin Abdulrahman Al Thani, junto a altos funcionarios de Israel y Egipto.
La necesidad de modificar el despliegue en el corredor se discutió intensamente en El Cairo. Durante las conversaciones de ayer, Israel y Egipto lograron reducir sus diferencias sobre este tema.
El jefe del Shin Bet, Ronen Bar, el director del Mossad, David Barnea, y el general Eliezer Toledano, junto con el jefe de inteligencia egipcia, Abbas Kamel, participaron en reuniones que involucraron también al asesor principal de Biden para Oriente Medio, Brett McGurk.
¿Qué dijo la Casa blanca?
Según el comunicado emitido por la Casa Blanca, el mandatario estadounidense "destacó la urgencia de cerrar el acuerdo de alto el fuego y liberación de rehenes y discutió las próximas conversaciones en El Cairo para eliminar cualquier obstáculo restante".
En la llamada, los dos líderes también abordaron los esfuerzos de Estados Unidos en favor de la defensa de Israel "contra todas las amenazas procedentes de Irán y de sus grupos terroristas aliados Hamás, Hizbulá y los hutíes, incluidos los actuales despliegues militares defensivos estadounidenses".