El Sahara, el desierto más grande del mundo, vivió un fenómeno meteorológico extraordinario: lluvias raras que formaron lagunas azules en medio del desierto. Este evento climático extremo ha dejado atónitos a científicos y locales al convertir sus dunas en un mar de agua. En el sureste de Marruecos, las precipitaciones alcanzaron niveles inéditos, revitalizando paisajes que habían permanecido secos durante años.
Oasis inesperado en el Sahara
Regiones como Tata, en Marruecos, recibieron en tan solo 2 días más lluvia de la que suelen recibir en un año entero. La localidad de Tagounite registró precipitaciones que superaron las 3.9 pulgadas en un solo día, una cifra que resalta la intensidad de este evento climático. Estos números contrastan drásticamente con las escasas precipitaciones anuales que caracterizan al Sahara.
Dunas convertidas en lagos
Un sistema de bajas presiones azotó la región, descargando casi 20 centímetros de lluvia en algunas zonas, según datos preliminares de la NASA. Las imágenes satelitales capturaron el agua fluyendo entre las dunas y antiguos edificios, creando un paisaje surrealista. En Merzouga, las palmeras se reflejaron en los nuevos lagos, atrayendo a aventureros y dejando a los lugareños maravillados.
Diluvio revive el lago Iriqui
Las lluvias transformaron radicalmente el paisaje, convirtiendo tierras áridas en oasis temporales. El lago Iriqui, seco durante medio siglo, se llenó de agua gracias a este diluvio. Ciudades como Errachidia experimentaron un aumento de más del 400% en sus precipitaciones habituales para el mes de septiembre.
Houssine Youabeb, de la agencia meteorológica marroquí, afirmó que no se había registrado un evento de esta magnitud en la región en los últimos 50 años, informó CBS News. El contraste entre el desierto árido y los nuevos cuerpos de agua, con las palmeras meciéndose al viento, es una imagen que quedará grabada en la memoria de quienes la presenciaron.
The Sahara Desert is flooding in Morocco for the first time in nearly 50 years after heavy rain. pic.twitter.com/20NDCdxjbP
— Globe Eye News (@GlobeEyeNews) October 13, 2024
Un evento con doble filo
Si bien este fenómeno ha creado paisajes impresionantes y ha recargado las reservas de agua subterránea, también ha tenido consecuencias negativas. CNN informó que las inundaciones causaron más de 20 muertes en Marruecos y Argelia, y destruyeron cultivos. Además, las regiones ya afectadas por desastres naturales necesitaron ayuda de emergencia para enfrentar esta nueva crisis.
El Sahara, ¿víctima del calentamiento global?
El Sáhara, que cubre más de 3.6 millones de millas cuadradas, ofrece ahora una oportunidad única para observar cómo estos cambios impactan el medio ambiente. Los científicos relacionan estos eventos extremos con el cambio climático.
A medida que las temperaturas globales aumentan, se espera que estos fenómenos se vuelvan más frecuentes e intensos. El Sahara, tradicionalmente uno de los lugares más secos del planeta, podría experimentar cambios significativos en su clima en las próximas décadas.
Aunque estos fenómenos meteorológicos asombran a expertos y científicos, el impacto duradero de las lluvias en el Sáhara continúa siendo un tema de estudio. Este episodio sirve como un recordatorio claro de la naturaleza caprichosa y de los cambios constantes en los patrones climáticos globales. A medida que el clima sigue evolucionando, solo el tiempo revelará cómo estas raras lluvias influirán en el delicado ecosistema del Sahara.