Según datos del último censo en los Estados Unidos, 7.1 millones de abuelos en el país viven con nietos menores de 18 años, y aproximadamente 2.3 millones de ellos son responsables de sus nietos. Cerca de la mitad de estos abuelos tienen 60 años o más.
Muchos abuelos se ven obligados a asumir un papel más activo en la crianza de sus nietos debido a diversas circunstancias, como problemas de salud mental de los padres, abuso de opioides, divorcio o la necesidad de que los padres trabajen.
La crianza de nietos por parte de abuelos puede impactar significativamente su jubilación. Muchos dependen de ingresos fijos, y asumir la responsabilidad de sus nietos puede generar estrés financiero adicional, afectando su capacidad para ahorrar y disfrutar de su jubilación. Sin embargo, cuidar a los nietos también tiene grandes beneficios para ellos.
Los beneficios de cuidar a los nietos
Un estudio reveló que los abuelos que cuidan de sus nietos tienen un 37% menos de riesgo de muerte que otros de su misma edad que no tienen esa responsabilidad. Además, los nietos también se benefician emocionalmente al estar en contacto con sus abuelos.
Para hacer frente a estos desafíos, existen varios recursos y programas de apoyo. Muchas organizaciones sin fines de lucro ofrecen servicios de asesoramiento, asistencia financiera y grupos de apoyo para abuelos cuidadores.
El gobierno federal también proporciona algunas ayudas, como el Seguro Social y el Programa de Asistencia Temporal para Familias Necesitadas (TANF). Sin embargo, la accesibilidad y suficiencia de estos recursos pueden variar considerablemente según el estado y la situación individual.
En términos legales, los abuelos que crían a sus nietos pueden encontrarse en una situación complicada.
En muchos casos, necesitan obtener la custodia legal de los niños para tomar decisiones importantes sobre su educación y atención médica. Este proceso puede ser largo y costoso, y a veces es necesario enfrentar obstáculos legales para obtener los derechos necesarios. Además, la situación puede ser aún más compleja en casos de padres que están en desacuerdo o no pueden ser localizados.