"Soy George Harris. Un tal señor Harris, de Kentucky, decía que yo era su propiedad. Pero ahora soy un hombre libre en la tierra libre de Dios. Reclamo a mi esposa y a mi hijo como míos. Jim y su madre están aquí. Tenemos armas para defendernos y planeamos usarlas. Pueden acercarse, si quieren; pero el primero de ustedes que entre será hombre muerto, y el siguiente, y el siguiente; y así sucesivamente hasta el último."
La cabaña del tío Tom, Harriet Beecher Stowe
Recientemente escuché una excelente versión en audio de este clásico libro de 1852 de Harriet Beecher Stowe, inspirado en la Ley de Esclavos Fugitivos de 1850. Esta ley otorgaba a los dueños de esclavos del sur de Estados Unidos la capacidad de rastrear a los esclavos que habían escapado, sin importar dónde estuvieran, y devolverlos a la esclavitud, sin considerar las consecuencias para el esclavo y para sus familias. Stowe, una abolicionista indignada, sabía que su libro, al resaltar la barbarie e inhumanidad de los dueños de esclavos del sur y sus colaboradores industriales del norte, expondría las profundas contradicciones entre la esclavitud estadounidense, la Constitución y el cristianismo.
Tenía dos razones para volver a visitar esta obra clásica, que vendió más ejemplares que cualquier otro libro publicado en el siglo XIX después de la Biblia. La primera razón era comprender mejor la imagen problemática del tío Tom. El tío Tom, tal como se imagina reside profundamente en el subconsciente de los afroamericanos. La segunda razón era ayudarme a imaginar cómo se podría describir la política declarada de la administración Trump de rastrear y capturar a un millón de inmigrantes "ilegales", basada en la historia real de estadounidenses cazando a africanos que buscaban refugio en estados libres y Canadá. (El río Ohio era conocido como el "río Jordán" por los negros que buscaban cruzar desde Kentucky, un estado esclavista, hacia Ohio y la libertad).
El verdadero tío Tom
En cuanto a la primera razón, el tío Tom es probablemente una de las definiciones más despectivas que un afroamericano puede atribuir a otro. Se utiliza con desprecio para describir a alguien que, por sus acciones, traiciona a su raza y niega su negritud. Si esta es tu opinión sobre el tío Tom, no estás solo, pero también estás equivocado. El verdadero tío Tom era un hombre cristiano y principista que sacrificó voluntariamente su cuerpo, pero nunca su alma, para proteger a sus compañeros esclavos y a su familia. En mi relectura, llegué a admirar al tío Tom, a pesar de no ser cristiano. Mi admiración no surge de lo que él creía, sino porque creía en algo y vivía conforme a sus creencias. La mayoría de las personas abandonan sus ideales ante el menor signo de dificultad. Más aun como en aquellos tiempos eran numerosos los riesgos, como por ejemplo la brutalidad física que el tío Tom soportó. Recomiendo leer el libro.
Paralelismos con la deportación masiva
La segunda razón para releer el libro fue porque veo en la administración entrante que dirigirá a la nación las mismas fuerzas impulsivas que América experimentó durante la esclavitud. En lugar de afroamericanos fugitivos siendo cazados y regresados a la esclavitud, serán inmigrantes indocumentados quienes serán los perseguidos y expulsados. La esclavitud separaba notoriamente a madres de hijos y a esposos de esposas. ¿Qué pasará cuando se rastree a los inmigrantes? ¿Quiénes serán los cazadores? ¿Dónde serán detenidos? ¿Qué se permitirá hacer con los inmigrantes? ¿Escogerás a una madre y su niño? quizás el hijo con documentos.

Fuente: U.S. Bureau of Census
Un estudio de la Escuela de Administración de Yale estima que la población de inmigrantes indocumentados en Estados Unidos es de aproximadamente 19.6 millones. Los inmigrantes indocumentados (sujetos a deportación) no forman parte de la población censada.
El libro de Stowe trajo la realidad de la esclavitud a los hogares estadounidenses. Cuando la autora visitó al recién electo presidente Abraham Lincoln, él le dijo: "Así que usted es la pequeña dama que inició esta guerra civil".
La inmigración es un problema, pero las "soluciones" que considera la administración entrante serán más destructivas que cualquier cosa que este país haya experimentado desde el fin de la esclavitud.
"Aquellos que no aprenden de la historia están condenados a repetirla."
George Santayana