Elon Musk, el jefe de X, antes conocida como Twitter, confirmó que la plataforma restringe el tráfico a sitios web externos penalizando las publicaciones con enlaces salientes. Esta confirmación se produjo después de que Paul Graham, un destacado inversor tecnológico, expresara su preocupación por la práctica de X de degradar los tuits que contienen enlaces.
Graham destacó los retos a los que se enfrentaba a la hora de seguir los avances debido a esta despriorización. Musk respondió recomendando a los usuarios que integraran descripciones en sus tuits y colocaran enlaces en las respuestas. Argumentó que esto evitaría los "enlaces perezosos", pero no proporcionó más aclaraciones a la consulta de Graham el lunes por la tarde.
Durante algún tiempo, periodistas y analistas sospecharon que existían penalizaciones para las publicaciones con hipervínculos a través de la línea de tiempo de X y los algoritmos de recomendación. Musk lo confirmó en octubre de 2023, explicando que el algoritmo de la plataforma pretende maximizar el compromiso de los usuarios en X, dando así menos visibilidad a los enlaces que hacen que los usuarios hagan clic.
El enfoque de Musk refleja su ambición de desarrollar un ecosistema impulsado por los creadores dentro de X desde que adquirió Twitter por 44.000 millones de dólares en octubre de 2022 y su posterior cambio de marca. Al animar a los usuarios a publicar contenidos directamente en X, Musk también permite que algunos usuarios obtengan ingresos de las publicaciones de alto compromiso.
La restricción de los hipervínculos refleja la postura adversaria de Musk hacia los medios de comunicación tradicionales, que a menudo escudriñan sus empresas. Esta tensión ha llevado a muchos periodistas a ver X como una plataforma menos viable para compartir su trabajo, en parte debido a las restricciones de hipervínculos y a las controvertidas acciones políticas de Musk.
Reflejando este sentimiento, The Guardian, uno de los principales periódicos británicos, detuvo las publicaciones oficiales en X a principios de este mes. La publicación criticó la plataforma por considerarla un "sitio mediático tóxico" y se opuso al supuesto uso que Musk hace de X para influir en el discurso político.
Estos acontecimientos en X tejen una compleja narrativa sobre el intercambio de contenidos en la era digital, caracterizada por las tensiones entre las plataformas de medios sociales y los medios de noticias tradicionales. La dinámica en evolución plantea interrogantes sobre el futuro del intercambio abierto de información y la creación de contenidos específicos para cada plataforma.