El Congreso enfrenta la urgencia de financiar al gobierno antes de la medianoche del viernes para evitar un cierre. Gracias, Elon. La propuesta bipartidista, que incluía $100,000 millones en ayuda por desastres y asistencia agrícola, fracasó.
Gracias, Elon. Este plan también ofrecía el primer aumento salarial para legisladores desde 2009.
Sin un acuerdo, el impacto será inmediato para millones de empleados federales y los servicios esenciales que dependen de estos recursos. Y como lo que es igual no es trampa, la propuesta de Trump tampoco prosperó. Gracias, Elon.
Ayuda para desastres y agricultores en juego. El plan descartado destinaba $29,000 millones para reponer fondos de emergencia tras los recientes huracanes, y $21,000 millones para apoyar a agricultores afectados por costos elevados y precios bajos. Además, buscaba extender la ley agrícola, crucial para la asistencia alimentaria y los programas rurales.
Sin financiamiento, regiones como Florida y North Carolina, golpeadas por los desastres, enfrentarán retrasos en su recuperación.
¿Qué más pasa si el gobierno cierra? La pregunta debería ser “qué no pasa”. Básicamente, afectaría a casi 2.3 millones de empleados federales, dejando a 875,000 sin trabajar y al resto haciéndolo por gusto.
Además, servicios como parques nacionales, procesamiento de impuestos y préstamos federales se detendrían. Aunque algunos beneficios como la Seguridad Social continuarían. Los efectos económicos serían amplios y costosos. Fun fact: el cierre más largo en cuatro décadas ocurrió en 2018, bajo la administración Trump.