La serie Succession se convirtió en uno de los fenómenos televisivos más comentados de la última década, especialmente por su retrato de las dinámicas de poder dentro de una familia multimillonaria propietaria de un conglomerado mediático.
Muchos destacaron las similitudes entre los personajes de la serie y la influyente familia Murdoch, una de las dinastías más poderosas en el mundo de los medios de comunicación.
A Rupert Murdoch, el patriarca de la familia, se le compara con Logan Roy, el personaje principal de Succession, y sus hijos, conocidos públicamente, con los herederos de Roy. Sin embargo, la reacción de los miembros de la familia Murdoch frente a la serie se convirtió en un tema interesante y algo ambiguo.
Sin importancia a las comparaciones
Rupert Murdoch, al igual que Logan Roy, es el fundador y dueño de un imperio mediático, que incluye importantes cadenas como Fox News y The Times. En varias entrevistas, Murdoch ha restado importancia a las comparaciones entre su vida y la trama de Succession.
En una ocasión, afirmó que el programa no refleja la realidad de su familia, destacando que no hay rivalidades tan dramáticas ni comportamientos tan extremos entre sus hijos. Pero, sus comentarios se interpretaron por algunos como una forma de minimizar las tensiones que, en muchos casos, sí han existido entre sus hijos y la lucha por el control del imperio mediático familiar.
A lo largo de los años, Murdoch ha mantenido una posición de poder centralizada, lo que ha generado especulaciones sobre quién tomará su lugar en el futuro, un tema recurrente en la serie.
Reacciones diversas
Los hijos de Rupert Murdoch, en particular, reaccionaron de manera variada ante la serie. James Murdoch, el hijo menor, se considera uno de los más abiertos en cuanto a su opinión sobre Succession.
En diversas entrevistas, reconocieron que, aunque encuentra la serie entretenida, no la considera una representación precisa de su familia.
James expresó que las tensiones familiares en su vida no son tan extremas como las que se ven en la serie, y señaló que la competencia dentro de su familia no ha sido tan destructiva como la que caracteriza a los personajes de Succession.
Esta postura contrasta con la de su hermano, Lachlan Murdoch, quien, en privado, ha sido más reticente a comentar sobre la serie, aunque se sabe que se ha sentido incómodo por las similitudes percibidas con su propio comportamiento en el pasado.
Un perfil bajo
El resto de la familia Murdoch también mantiene un perfil bajo respecto a la serie, con pocos comentarios públicos.
A pesar de ello, algunos observadores han señalado que el distanciamiento entre los hermanos Murdoch, las diferencias ideológicas y el control de los medios, reflejan en cierto modo las tensiones entre los personajes de Succession, en especial entre los hijos de Logan Roy.
La serie no solo explora las luchas de poder, sino también el desgaste emocional que estas provocan en los miembros de la familia, lo que podría resonar en ciertos aspectos de la vida de los Murdoch.