La caída del valor del Bitcoin demuestra la riesgosa volatilidad del sector para los inversionistas: después de superar el hito de los $100,000, la criptomoneda no ha dejado de desvanecerse.
Siguiendo la noticia. Al comienzo de la semana, el bitcoin cayó un 3% hasta los $91.827, según Coin Metrics. Esto marca un período difícil para la criptomoneda, que muestra una caída general del 9% en la última semana.
Una caída generalizada que genera preocupación
La caída del lunes por debajo de los $90.000 dólares evidencia una tendencia más amplia de retirada de los inversores de activos ligados al crecimiento como las criptodivisas y las acciones tecnológicas.
Junto al Bitcoin, el Ethereum sufrió una pérdida del 7%, y el índice CoinDesk 20, que vigila el mercado de las criptomonedas, registró una caída superior al 5%.
El sector tecnológico no salió ileso. Las acciones de Coinbase y MicroStrategy bajaron un 4% y un 3%, respectivamente. Mara Holdings experimentó un descenso del 4%, mientras que las acciones de Core Scientific cayeron un 2%.
La tendencia bajista de las criptomonedas
La primera semana de enero se inició esta tendencia bajista, espoleada por unos datos de nóminas inesperadamente sólidos que provocaron un aumento de los rendimientos de los bonos.
Entre líneas. Al mismo tiempo, las preocupaciones sobre la política comercial del presidente electo Donald Trump fortalecieron el dólar estadounidense, ejerciendo más presión sobre el Bitcoin y otros activos de riesgo.
James Davies, cofundador y CEO de Crypto Valley Exchange dijo que "las necesidades de liquidez surgen de los picos del mercado de divisas debido a las sólidas cifras económicas estadounidenses de fin de año y a un fuerte repunte del mercado bursátil. El dinero encuentra nuevos destinos a corto plazo".
Davies también señaló la necesidad de que los inversores en Bitcoin comprendan que éste se comporta como una divisa en medio de este escenario económico.
¿Se desvanece la esperanza de los $200,000?
Al entrar en 2025, los inversores tenían grandes esperanzas alimentadas por la anticipación pro cripto tanto del Congreso como de la Casa Blanca, que eclipsaron los retos macroeconómicos anteriores.
No todo es color de rosa. Los acontecimientos de la semana pasada (en especial la caída de las grandes tecnológicas) han reavivado los temores de posibles turbulencias en el criptomercado durante los próximos meses.
A pesar del impresionante crecimiento del 120% del Bitcoin en 2024, el comienzo de 2025 parece menos prometedor.
Actualmente con una caída del 3%, la criptomoneda demuestra la imprevisibilidad a la que se enfrentan los criptoinversores mientras navegan por el cambiante panorama económico.