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Supera el cambio de horario de verano sin perder energía ni salud

Adelantar el reloj roba luz solar en las mañanas, algo clave para tu ritmo circadiano.

Exponerte al sol al despertar mejora tu energía. | Foto: Miriam Alonso/Pexels.

Este domingo 9 de marzo, el horario de verano alterará relojes y, lo más importante, tu cuerpo. Al perder una hora de sueño, no solo despiertas más cansado, también arriesgas tu salud. Lo que parece un reajuste inocente, realmente afecta tus ritmos internos y puede traerte más problemas de los que imaginas. ¿Listo para sobrevivir esta semana?

El golpe al corazón, literal

La American Heart Association (AHA) advirtió que los infartos aumentan un 24% los lunes posteriores al cambio horario. Los datos en Finlandia también mostraron un alza preocupante, con un 8% más de accidentes cerebrovasculares en los dos días posteriores. María Delgado-Lelievre, especialista en hipertensión de la Universidad de Miami, explicó que “esta alteración empuja el cuerpo a una descoordinación que impacta el desempeño cardiovascular”.

Nada se salva, ni siquiera tu humor. Lo que pasa con el reloj interno repite un efecto dominó; pierdes energía, comes sin control y hasta trabajar se complica.

El horario de verano no te deja brillar

Adelantar el reloj roba luz solar en las mañanas, algo clave para tu ritmo circadiano, que controla desde tus ciclos de sueño hasta tu metabolismo. El doctor Alcibiades Rodríguez, experto en sueño de NYU, destacó en entrevista con New York Post que “la falta de luz en las mañanas retrasa el ajuste natural de nuestro cuerpo, haciéndonos sentir agotados todo el día”.

La solución no es encerrarte ni compensar con más café. Según la AHA, simplemente exponerte al sol al despertar mejora tu energía y prepara el terreno para un descanso reparador en la noche.

Pequeños cambios, grandes resultados

Pasar el horario de verano sin sufrir no es misión imposible. Estas técnicas probadas te salvarán de bostezar sin parar en la oficina:

  • Entra al modo verano poco a poco: dormirte y levantarte 15 minutos más temprano todos los días antes del cambio ayuda a tu cuerpo a adaptarse.
  • Elimina tus enemigos nocturnos: olvida el alcohol, las redes sociales y la pizza a medianoche. Todo eso sabotea tu descanso.
  • Sí a los rituales constantes: mantener horarios fijos para acostarte y despertarte ayuda a estabilizar tu sueño.
  • Disfruta la oscuridad: un cuarto sin distracciones brillantes ni ruido facilita que caigas en un sueño profundo.

Aquí no hay placebos

No solo las mañanas cambian; las noches previas al horario de verano también influyen. Muchos expertos recomiendan dejar el teléfono lejos de la cama y desconectar cualquier fuente de luz azul al menos una hora antes de acostarte. Pequeños trucos como este mejoran tu rutina más de lo que imaginas.

Estos simples ajustes diarios mantienen tus patrones de sueño en equilibrio todo el año. No necesitas trucos complicados, solo un poco de constancia.

¿Por qué importa tanto?

Dormir bien es más que no bostezar. La falta de sueño impacta tu corazón, tensión arterial y hasta tu memoria. Algunos estudios, como los publicados por la Journal of the American Heart Association, mostraron que personas con patrones de sueño irregulares enfrentan mayor riesgo de arterias endurecidas y problemas cardíacos.

Además, un mal descanso afecta a adolescentes y niños. Más de un tercio de los niños en EEUU no duerme lo suficiente, según los datos más recientes. Si ellos no logran cumplir con sus 9-12 horas diarias de sueño, enfrentan problemas como obesidad, menor rendimiento académico y, en casos graves, arritmias.

Adelantar el reloj no debe descarrilar tu rutina ni poner en jaque tu salud. El horario de verano no perdona, pero puedes ganarle con conciencia y buenos hábitos. Prioriza tu descanso y mantén esa energía que tanto necesitas para sobrevivir esta semana, o cualquier lunes. ¿Quién dice que no puedes apagar relojes y brillar igual al día siguiente?

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