Funcionarios, empresarios, ciudadanos y hasta jugadores de los Washington Commanders están uniendo sus esfuerzos para lograr un fin en común: hacer que en la Cámara de Representantes se apruebe un proyecto de ley que le permita a la ciudad seguir gastando su presupuesto de 2025 y evitar un recorte de mil millones de dólares en servicios esenciales.
Tras aprobar la semana pasada el proyecto de ley de gastos del Partido Republicano, destinado a evitar el cierre del gobierno pero que eliminó una disposición que permitía a la ciudad mantener su presupuesto local de $21 mil millones, se originó esta iniciativa. Esta omisión forzaría a la ciudad a recortar $1 mil millones de su presupuesto a mitad del año fiscal 2024.
No obstante, después de una fuerte campaña de presión liderada por la administración de la alcaldesa Muriel E. Bowser y el contacto masivo de más de mil residentes del Distrito con las oficinas del Senado la semana pasada, el Senado aprobó unánimemente el viernes por la noche un proyecto de ley independiente que representaría una solución para DC, permitiendo a la ciudad mantener sus niveles de gasto del año fiscal 2025.
Este proyecto de ley ahora se dirige a la Cámara de Representantes, lo que ha motivado a Bowser a relanzar una campaña para persuadir a los legisladores de esa cámara a revertir los recortes.
“Creo que se ha argumentado que se trata de fondos locales de DC, y que recortarlos a mitad de año sería devastador para nuestras operaciones y para nuestros objetivos comunes de hacer de nuestra ciudad la mejor, la más hermosa y una que sirva a nuestros residentes. Por lo tanto, tenemos mucha confianza y seguiremos trabajando con el Congreso hasta su aprobación final”, expresó la alcaldesa en una rueda de prensa que convocó el lunes.
Líderes se unen para que se apruebe el proyecto de ley
El reciente proyecto de ley de gastos en la Cámara de Representantes ha desencadenado una de las luchas más intensas en los 50 años de autonomía del Distrito de Columbia.
Funcionarios del Distrito de Columbia han enfatizado que estos recortes no generarían ahorros para el gobierno federal, sino que castigarían a la comunidad, resultando en disminuciones potencialmente devastadoras en servicios vitales y despidos de empleados gubernamentales. “Nuestro autogobierno local es limitado, pero nuestras voces han sido escuchadas”, afirmó la alcaldesa Bowser, quien agradeció a la senadora Susan Collins y a otros legisladores por apoyar a DC en esta situación crítica.
El mensaje de apoyo llegó incluso desde el Washington Commander, cuyo representante se unió a la iniciativa para presionar a líderes republicanos. Sin embargo, la alcaldesa destacó que, independientemente de estos desafíos, el Distrito está comprometido con las inversiones necesarias en el Capital One Arena, donde se invertirán más de $500 millones para mejoras.
El Consejo Federal de la Ciudad del Distrito, una organización cívica que defiende los intereses comerciales y económicos de DC, se unió a otros grupos para abogar por una solución en el Senado, advirtiendo que estos recortes podrían causar "inestabilidad económica", esencial para mantener la atracción de clientes, empleados e inversores hacia la ciudad.
