Al concluir la sesión legislativa de Maryland este lunes, los legisladores aprobaron rápidamente un proyecto de ley revisado sobre las protecciones a los inmigrantes. La decisión, que puso de relieve las intensas negociaciones, reflejó los diferentes puntos de vista sobre las estrategias de aplicación de la ley de inmigración.
El proyecto de ley 1222 de la Cámara de Representantes pretende ayudar a "lugares sensibles" como iglesias y escuelas ante posibles visitas de las autoridades de inmigración e introduce medidas específicas de privacidad para los datos de los inmigrantes. Sin embargo, omite disposiciones que impedirían a los condados colaborar con las agencias federales de inmigración en determinadas áreas.
Los activistas esperaban que se prohibieran la alianza 287(g), en los que las fuerzas de seguridad locales actúan como agentes federales de inmigración. Ninfa Amador-Hernández, de CASA, criticó la ausencia de esta disposición en el proyecto de ley final, expresando su decepción en nombre de los activistas.
Al acercarse la fecha límite de la sesión, la delegada Jazz Lewis, del condado de Prince George, hizo hincapié en la necesidad de llegar a un consenso para evitar dejar protecciones sin abordar. El reloj corría y el riesgo era no aprobar ninguna protección", dijo Lewis, explicando la decisión de aceptar las modificaciones del Senado.
Las versiones anteriores de la HB1222 pretendían impedir totalmente que los condados de Maryland suscribieran programa 287(g). En su lugar, los legisladores incluyeron partes de la Ley de Lugares Sensibles, que ordena al fiscal general que oriente a las agencias estatales sobre la aplicación de las leyes de inmigración. Además, el proyecto de ley incluye ahora medidas para restringir la venta de datos personales, aunque se esperan más detalles.
La directora de Política de CASA, Cathryn Jackson, expresó su descontento por la exclusión de la cláusula 287(g), subrayando su potencial para contrarrestar las políticas de inmigración de la era Trump. 'Es un canal directo en el proceso de deportación', dijo Jackson, señalando las preocupaciones de la comunidad sobre los resultados de la sesión.
El presidente del Senado, Bill Ferguson, reconoció las limitaciones a las que se enfrentan los estados respecto a la regulación federal en materia de inmigración. 'Hay un límite a lo que los estados pueden lograr en estas áreas', dijo Ferguson, haciendo hincapié en la influencia de la gobernanza federal.
El gobernador de Maryland, Wes Moore, expresó su apoyo a la colaboración con las fuerzas del orden federales, pero criticó algunas prácticas extralimitadas que alteran el debido proceso. “Siempre trabajaremos para eliminar a los delincuentes violentos”, declaró Moore, equilibrando la seguridad pública con la adhesión constitucional.