El Gran Premio de Bahréin 2025 quedó grabado con letras doradas para McLaren y, en especial, para Oscar Piastri, quien dominó la carrera desde la primera curva hasta la última vuelta. Fue un espectáculo donde se combinaron el talento, la estrategia y, por supuesto, el drama que solo la Fórmula 1 sabe servir en bandeja. Pero no todo fue triunfos, mientras unos brillaron, otros sufrieron un domingo para olvidar.
Los ganadores toman el escenario en Bahréin
Oscar Piastri se robó los reflectores, demostrando que no solo es rápido, sino también frío bajo presión. Un safety car en la mitad de la carrera compactó al pelotón, poniendo su liderazgo en riesgo. Sin embargo, el piloto australiano mantuvo a raya a sus perseguidores y volvió a imponer un ritmo inalcanzable tras el reinicio. Con esta victoria, Piastri suma grandes puntos al campeonato y se consolida como un serio contendiente. Según CNN, Piastri afirmó tras la carrera que era "un resultado especial, especialmente en un circuito donde McLaren no solía brillar".
Otro que merece aplausos es George Russell, quien llevó su Mercedes al segundo lugar pese a luchar con problemas técnicos que incluyeron un fallo en el sistema DRS y un tablero errático. Aun así, Russell mantuvo la compostura y resistió una intensa presión de Lando Norris, quien completó el podio.
Perdidos en el desierto de Sakhir
Red Bull fue el claro perdedor de la jornada, con Max Verstappen anclado en un decepcionante sexto lugar tras dos paradas lentas en pits y un auto que simplemente no le respondía. Su compañero Yuki Tsunoda, aunque terminó en noveno, no hizo mucho para salvar el honor de un equipo que claramente está en aprietos. Las fuentes de BBC reportaron que la cúpula de Red Bull convocó a una "reunión de crisis" inmediata tras la carrera.
Otro que salió herido fue Lando Norris, quien a pesar de un tercer puesto, no estuvo satisfecho. Su batalla con Charles Leclerc por el podio fue un espectáculo, pero varias maniobras erráticas le costaron tiempo valioso. Norris describió su actuación como "desordenada y frustrante", dejando claro que sigue detrás en la lucha interna contra Piastri.
El español Carlos Sainz Jr. tampoco escapó al caos con su Williams. Su abandono en Bahréin marcó su segundo DNF de la temporada, un inicio poco alentador en el que solo ha logrado completar una carrera en los puntos. En Sakhir, un incidente con Tsunoda dañó gravemente el lateral de su coche, robándole hasta 50 puntos de carga aerodinámica, según reportó AS. Finalmente, un bloqueo en la resalida y un choque con Antonelli sellaron su suerte, dejándolo fuera de una vez más. Arabia Saudita se presenta como su oportunidad para revertir el rumbo, aunque su frustración no es fácil de disimular.
Y hablando de frustraciones, Fernando Alonso y Aston Martin vivieron una pesadilla. Alonso terminó 15º, mientras que Lance Stroll fue 17º. El doble campeón mundial calificó el desempeño de su equipo como "inaceptable", según Motorsport.com. Arabia Saudita será crucial para revertir esta caída en picada.
Mirando hacia Jeddah
Con Bahrain dejando un sabor agridulce para varios equipos grandes, todas las miradas ahora se centran en el próximo Gran Premio en Arabia Saudita. El circuito urbano de Jeddah ofrece un trazado completamente diferente con largas rectas y curvas rápidas, lo que podría equilibrar las fuerzas entre los equipos.
El pronóstico climático, según Motorsport.com, anticipa temperaturas cercanas a los 35°C con alta humedad, condiciones que pondrán a prueba tanto a los coches como a los pilotos. Sin lluvia en el horizonte, la batalla se desarrollará bajo las luces de este impresionante circuito nocturno.
McLaren buscará mantener su dominio, mientras que Mercedes intentará capitalizar su consistencia. Por otro lado, los problemas internos de Red Bull y los errores estratégicos de sus pilotos les colocan en una situación límite. Para Carlos Sainz, será una oportunidad para redimir su suerte y regresar a la lucha por los puntos con un rendimiento renovado.
La temporada 2025 está prendiendo motores con fuerza, y el GP de Bahréin nos dejó con ganas de más. Con batallas que se estrechan entre compañeros de equipo y gigantes en apuros, la Fórmula 1 sigue siendo la cumbre de la emoción automovilística. Arabia Saudita promete más espectáculos y, quién sabe, quizá otro giro inesperado. ¿Están listos para más acción? Nosotros sí.